ALICANTE. El expediente incoado para resolver el contrato sobre la reforma de la Plaza de San Blas de Alicante llega a su fin, lo que devuelve la ejecución de las obras casi a la casilla de salida. El equipo de gobierno, ahora compuesto por el Partido Popular (PP) en solitario, aprobó este martes en Junta Local el acuerdo definitivo por el que se completa el proceso de ruptura contractual con la empresa que resultó adjudicataria de las obras: la constructora de origen alicantino Ecisa, ahora integrada en el grupo Urbas.
La decisión se fundamenta en el incumplimiento contractual imputable a la propia constructora, después de que la dirección facultativa responsable de la supervisión de los trabajos constatase que las obras -que se iniciaron en junio de 2022- quedaron paralizadas en la primera semana de noviembre y que no se reanudaron pese a los requerimientos formulados en ese sentido.
De ahí que, el equipo de gobierno acordase iniciar el proceso para rescindir el contrato en febrero de este año, lo que permitió que los responsables de la compañía registrasen alegaciones en defensa de su contrato. En ese trámite, los representantes de la constructora justificaron la paralización de los trabajos en el incremento de los materiales del sector de la construcción registrado como consecuencia de la guerra de Ucrania, así como la continuidad de las complicaciones generadas con motivo de la pandemia de la covid-19.
Sin embargo, los informes técnicos descartaron esas alegaciones al constatar el abandono de las obras, así como impagos respecto a proveedores de materiales, entre otros puntos como la salida hacia otras empresas de varios de los trabajadores de la compañía que ejercían como responsables técnicos de la ejecución del contrato. Así, la propuesta de rescisión se elevó al Consell Jurídic Consultiu (CJC) que refrendó en su informe la existencia de causa justificada para que se acordase la ruptura del contrato, como informó este diario el pasado junio.
Y ese es el trámite que se culmina ahora, con la incautación de la fianza de más de 122.831 euros depositada por Ecisa en el momento de la firma del contrato como garantía de su ejecución. En todo caso, la trascendencia del acuerdo reside en que deja el camino despejado para que se pueda convocar un nuevo concurso para que la reforma llegue a ejecutarse.
En principio, el nuevo proyecto adaptado a los trabajos pendientes y a las modificaciones introducidas con posterioridad ya estaría redactado, a la espera de que pueda elevarse a aprobación a una próxima Junta Local para que se convoque el nuevo concurso de obra, según apuntó el portavoz del equipo de gobierno, Manuel Villar. De hecho, el PP pretende que los trabajos puedan adjudicarse antes de fin de año. Con todo, hasta ahora no se ha concretado el nuevo importe del proyecto pendiente ni el plazo previsto para su finalización.
El proyecto original -una de las principales actuaciones de reurbanización de barrios impulsada por el Ayuntamiento con fondos propios- se adjudicó en diciembre de 2021 a Ecisa por un importe superior a los 2,9 millones y un plazo de ejecución de once meses. Todo parece indicar que la nueva licitación partirá con un presupuesto y una duración similares, toda vez que hasta ahora solo se habrían desarrollado los trabajos iniciales del proyecto.
Tras la ruptura del contrato sobre la Plaza de San Blas, el ayuntamiento aguarda ahora un segundo dictamen del CJC que permita respaldar la rescisión del encargo de construcción del parque del barrio de La Torreta (PAU 2) también adjudicado a Ecisa. Como informó este diario, la solicitud de ese dictamen quedó aprobada en Junta de Gobierno el pasado 23 de mayo, lo que permite augurar que la respuesta del órgano consultivo pueda producirse de forma inminente.
Al tiempo, la Junta Local aprobó este martes el pago al grupo Bertolín de la última certificación de obra por la ejecución del proyecto de remodelación de la avenida de Padre Esplá, por un importe de 400.480 euros, respecto a la obra que se dio por finalizada en febrero de 2022. En ese importe, se incluye una última revisión de precios por valor de 135.562 euros. Las obras se adjudicaron a grupo Bertolín en junio de 2020 por un importe de 2,3 millones (impuestos incluidos).