ALICANTE. El segundo concurso convocado por el Ayuntamiento de Alicante para ceder en concesión el quiosco de venta de turrones del Mercado Central situado junto a la calle Capitán Segarra se disputará finalmente entre dos postores. Y no unos cualquiera. Se trata de dos familias turroneras de tradición artesanal originarias de Xixona: los Monerris (de Turrones Monerris Sirvent) y los Moya (de Turrones Moya Beamut). Las dos familias se batirán en duelo esta vez por mantener una de las dos concesiones de esos quioscos: la del único que permanece disponible tras el primer concurso.
En esa primera convocatoria, celebrada entre los meses de mayo y junio, solo presentó oferta un un único licitador (La Borgonesse). Y lo hizo optando por la gestión de las dos instalaciones. Sin embargo, tuvo que escoger solo una de ellas, ya que el pliego de condiciones impedía que ambas tuviesen un mismo concesionario. La Borgonesse se decantó entonces por el quiosco próximo a Calderón de la Barca.
Se da la circunstancia de que la familia Monerris es, desde hace 80 años, la concesionaria del quiosco en disputa. Sin embargo, ni ellos, ni la familia Candela -que gestionaba el quiosco cedido a La Borgonesse- llegaron a participar en ese primer concurso. Sus respectivos gerentes alegaron que no se les había informado sobre su convocatoria, pese a que habían solicitado formalmente que se les informase al respecto.
Ahora, los Monerris no han perdido la segunda oportunidad. Y compiten con los Moya por gestionar ese puesto de venta durante los próximos diez años, con posibilidad de prórroga por otros cuatro años adicionales.
La licitación parte con un precio de 32.849 euros (sin impuestos) por los diez años de concesión, admitiéndose propuestas al alza. Ese factor supone la concesión de 60 de los 100 puntos posibles. Los 40 restantes se reparten en dos requisitos sobre las condiciones de los productos de venta.
En concreto, el pliego establece que se concederá entre 0 y 20 puntos al licitador que se comprometa a comercializar de forma exclusiva productos de fabricación 100% artesanal. Además, se asignarán entre 0 y 20 puntos más al interesado que se comprometa a vender turrones con Denominación de Origen Protegida o Indicación Geográfica Protegida.
Por lo pronto, Turrones Monerris Sirvent ya ha concertado la ocupación de un local comercial próximo al Mercado para poder mantener su actividad, al menos durante el periodo en el que se resuelve el devenir del concurso, ya que su concesión actual vence el próximo día 20. Como también ha informado este diario, Turrones Candela Espí fue el primer establecimiento en reubicarse con la apertura de nueva tienda en la avenida de la Constitución.