ALICANTE. Si el pasado 2018 retumbaba la noticia de que el primer festival de cine trans de España nacía en Alicante, este año se confirma su consolidación. Y es que la segunda edición de NosGusTrans asoma con la llegada del nuevo mes, del 5 al 9 de noviembre, pese a que en la anterior ocasión el evento se celebró en abril: "Este año también se iba a organizar en abril, pero era un mes electoral, luego vinieron más elecciones y también pensamos en posponerlo a verano, pero el tema de conseguir los locales para las proyecciones era más complicado", justifica el retraso Carlos Lamm, impulsor del festival junto a su compañera Lydia Na, una iniciativa organizada por la Asociación Entendemos LGTBI y nosgustas.com. Otra de las opciones que contemplaron fue la de trasladarlo a la última semana de octubre, haciéndolo coincidir "con el Día Internacional de Acción por la Despatologización Trans (21/10) y el Día Internacional de la Visibilización Intersexual (26/10). Sin embargo, por un tema de agenda de la Universidad de Alicante, al final lo traspasamos a la misma semana que la campaña electoral", comenta Lamm, dejando entrever la paradoja irónica. Y apunta que el deseo para ediciones posteriores es que se mantenga la idea de realizar el evento en octubre.
La disponibilidad de la UA suponía un requisito necesario porque, a través del vicerrectorado de Igualdad, la entidad colabora en este segundo festival, cogiendo el testigo de quien lo hizo el año anterior, el Ayuntamiento de Alicante. "En ambos casos la colaboración ha sido exquisita", comenta la falta de problemas que ninguna les ha generado para poner en marcha el festival. "Ni nos han censurado películas, ni nos han dado ninguna indicación. Todo lo contrario, siempre han estado muy por la labor de visibilizar al colectivo transexual", anota. Con esta mano que les tiende la UA, las proyecciones de los cinco días tendrán lugar en la Sede Ciudad de Alicante, donde se visualizarán doce películas -entre cortos y largometrajes- de entre las cerca de 40 propuestas presentadas a concurso.
A la sección con la que se inauguró el festival, trans, se han añadido tres más: "Hemos ampliado a intersexual, bisexual y queer, aunque todas las películas excepto una van a enmarcarse en cine trans", adelanta uno de los dos impulsores. Una temática no restrictiva, ya que explica que consideran cine trans "no solamente las películas de contenido transexual, sino aquellas que incluyen guionistas, productores/as, directores/as o protagonistas transexuales visibles, aunque solo sea uno/a de los/as miembros. Por poner un ejemplo, si la directora de un documental sobre las salinas de Torrevieja es una mujer trans, nosotros ya la consideramos como una película trans", aclara.
Además del aumento de las secciones, otra de las novedades que ayuda al crecimiento del festival es la compensación económica a la mejor película, con 100 euros como cantidad simbólica y con el público como jurado: "Quien vaya a ver los metrajes tendrá 15 minutos para votar por teléfono", explica Lamm el procedimiento. A este premio también se suma el de mejor guion, donde se entregará un diploma acreditativo acorde con la decisión de un jurado compuesto por expertos en cine, artistas y escritores.
Esta es la segunda edición de un festival de cine pionero, ya que no se había celebrado anteriormente ninguno de temática trans en España y, yendo más lejos, tampoco en ningún país de habla castellana: "A nosotros nos sorprendió mucho cuando decidimos impulsarlo el año pasado. Empezamos a moverlo y descubrimos que, aunque existen cientos de festivales lgtbi, en Europa solo había uno de cine trans en Francia y dos en Alemania. Además, recibimos bastantes cortos hispanoamericanos y fue cuando hallamos que en América Latina tampoco había ninguno", traslada. El motivo reside "en que normalmente el tema de la transexualidad es bastante complicado. Los prejuicios existen, sobre todo, por desconocimiento. La transexualidad es un tema por resolver bastante importante, porque hay mucho desconocimiento; la gente no acaba de entender qué es una persona trans y suele confundir a una mujer trans con un travesti o, incluso, con transformista", manifiesta el impulsor.
Con este tipo de festivales se consigue "visibilizar la realidad de las personas trans: nosotros somos tus vecinos, tus hermanos, tus hijos o tus compañeros de trabajo; no pasa nada por conocernos un poco más", reivindica amigable Lamm. Por su parte, recuerda que toda la ciudadanía está invitada a asistir "para que descubran qué otro tipo de cine se produce y, además, es gratuito, con algún estreno a nivel mundial. El cine es arte y a quien le gusten ambas le puede resultar interesante acudir".