ALICANTE. Cuenta atrás para las obras de mejora del trazado de la Línea 5 del tranvía, entre Playa de San Juan y el Centro de Alicante. La empresa pública Ferrocarriles de la Generalitat (FGV), operadora de la red metropolitana de tranvía de Alicante, prevé iniciar tras el verano las obras de acondicionamiento y refuerzo de la seguridad del recorrido por lo que respecta al tramo comprendido entre las paradas de Sangueta y de Puerta del Mar.
Se trata de una actuación que excede de un mero mantenimiento, a tener de la inversión prevista. El proyecto comprende un desembolso de 1,5 millones (impuestos incluidos) para la instalación del Sistema de Protección Automática de Tren (ATP), el mecanismo de frenado automático en caso de emergencia, por valor de 438.835,60 euros. Además, se incluye la actualización de la señalización del tramo, con un coste añadido de otros 908.686,67 euros, como había anticipado este diario.
En principio, FGV trabaja con la previsión de acometer los trabajos sin necesidad de interrumpir el funcionamiento del servicio como se había barajado inicialmente, al programar su ejecución mayoritariamente en horario nocturno, salvo en algún periodo puntual en el que resulte necesario actuar durante el día. Esa programación también influiría en los plazos de ejecución, ya que se prevé que los trabajos puedan alargarse en un máximo de ocho meses.
Las obras tendrán un plazo de ejecución máximo de ocho meses y se prevé desarrollarlas mayoritariamente en horario nocturno
Con esa intervención se daría cumplimiento al objetivo avanzado por la Conselleria de Obras Públicas y Política Territorial de mejorar las prestaciones de la línea y homogeneizar las instalaciones, dotándolas de los estándares de calidad y seguridad establecidos para el conjunto de la red de tranvía de Alicante. Tras su ejecución, se abordará la posibilidad de ampliar el número de frecuencias para que el tranvía pueda consolidarse como alternativa al vehículo privado en los desplazamientos entre el distrito de Playas y el Centro.
La Línea 5 se puso en funcionamiento en junio de 2019 tras la reapertura del ramal objeto de la intervención, que había quedado en desuso en el año 2013 con la inauguración de la estación subterránea de Mercado. Su recorrido coincide en el de la Línea 4 en quince paradas, desde plaza La Coruña a Sangueta, y cuenta con dos paradas propias en las estaciones de La Marina y Porta del Mar para completar el trazado. Con su inauguración, se reforzó la operativa de modo que se produce un servicio entre Playa de San Juan y el Centro cada 15 minutos, a bordo de la L-4 o de la L-5, con destino alterno a Luceros y Porta del Mar, respectivamente. Así, los usuarios de la L-5 disponen de la posibilidad de realizar transbordo en la parada de Sangueta y conectar con los tranvías de las Líneas 1 y 3 para acceder a Luceros.