DÉNIA. Temporal de mar tras temporal de mar, la playa de Blay Beach de Dénia desaparece. No hace falta que sea muy fuerte, su exposición a las corrientes marinas hace que las regeneraciones parciales no sirvan de nada. Por ello, la dirección general de Costas, ha presentado un proyecto para la regeneración de las playas del norte de Dénia (hacia el golfo de Valencia) que pretenden recuperar esa zona de forma casi definitiva, eso sí, con una fuerte inversión y un importante vertido de arena.
El proyecto está en fase de exposición al público, tiene un coste de 13 millones de euros y comprende el vertido de un total de 480.000 metros cúbicos de arena para actuar en la línea de costa entre el puerto de Dénia y la desembocadura del río Girona, y pretende consolidar una superficie mínima de playa de 30 metros. De ellos la mayor parte se destinarán a la playa de Blay Beach.
Es el tramo central el que corresponde con esa playa donde la superficie de arena no llega al metro, de hecho, esta es la parte que siempre desaparece cuando el mar toma un poco de fuerza. El agua, casi linda con los muros de las antiguas viviendas. En este tramo Costas prevé la construcción de dos espigones de 340 y 345 metros que permitirán "contener los aportes de arena" la arena que arrastran las corrientes del norte y el otro la que aportan las corrientes del sur. Asimismo se depositará unos 452.103 metros cúbicos de arena para recrecer la playa hasta los 37 metros.
En los otros tramos del proyecto, junto al puerto y junto a la desembocadura, las actuaciones se puede decir que son menos invasivas. Así en la primera, el tamaño de la playa supera en algunos puntos lo 80 metros y la única actuación permitirá preservar un cordón dunar. Mientras que en la otra, junto al río, la propuesta pasa por regenerar con cantos rodados una porción localizada en la margen derecha del río, que permitirá ampliar la playa desde lo 10 metros hasta 30.
Según recoge el proyecto pretenden "proteger los edificios y estructuras que trasdosan la playa frente a los temporales", de tal forma que la misma tenga una "anchura mínima que permita que con los mayores temporales previsibles, el retranqueo de la linea de costa debido a la acción de las olas sea tal que se mantenga un resguardo suficiente".
El proyecto para esta parte de la playa de Dénia, se suma a otro presentado hace meses para la zona de Les Deveses, más al norte de la capital de la Marina Alta y ya en su conexión con la provincia de Valencia.
Con un importe similar, 14 millones, propone la construcción de 3 espigones nuevos y el vertido de casi 600.000 metros cúbicos de arena. El primer espigón estará situado junto al cauce del río Racons, tendrá una longitud de 470 metros y de ellos la mitad estará sumergido y el tercero no será nuevo sino que será ampliado el que ya existe en la playa de l'Almadrava. El segundo estará junto a la calle río Grande.
Con estas dos actuaciones, la dirección general de Costas pretende poner una solución al estado de las playas de Dénia, su parte norte, que en algunos tramos sufren y se reducen cuando se desencadena temporal. O por qué no, cuando el mar quiere volver a donde siempre estuvo.