Alicante y Transición Ecológica retoman el proceso para regularizar el vertido de la depuradora sur 

ALICANTE. El Ayuntamiento de Alicante y la Conselleria de Transición Ecológica inician el proceso para regularizar el vertido de aguas depuradas desde la estación de Rincón de León: la infraestructura situada entre el cauce del Barranco de las Ovejas y el trazado de la A-31, que trata los efluentes procedentes de la zona sur del término de Alicante, los de sus polígonos industriales y los del término de San Vicente, con una capacidad de tratamiento de 75.000 metros cúbicos diarios.

El departamento municipal de Medio Ambiente registró a finales de mayo de 2019 la solicitud para que se concediese autorización de vertido definitiva, después de que se ejecutasen las obras de ampliación y modernización de la infraestructura, en el año 2001, cuando se abordó la construcción de un emisario submarino para canalizar esos vertidos. Se trata de un trámite que se concertó completar en un última reunión mantenida entre representantes de la Dirección General del Agua de la Conselleria de Medio Ambiente y del Ayuntamiento de Alicante, en noviembre de 2018. 

Y ahora, justo un año después de que se registrase la solicitud, es cuando se le da curso con su exposición al público para la presentación de alegaciones (una posibilidad demorada hasta que se levanten la suspensión de plazos que conlleva la declaración del Estado de Alarma). La solicitud municipal de regularización del vertido se acompaña de un informe detallado sobre las actuaciones de ampliación y modernización llevadas a cabo por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) en la estación desde el año 2002 (cuando la instalación fue puesta a disposición del Ayuntamiento de Alicante) para la mejora de la depuración de los caudales, así como de los estudios requeridos por el Consell para evaluar las consecuencias que esos vertidos pudiesen llegar a ocasionar sobre el medio marino.

En esta línea, el área municipal de Medio Ambiente detalla que la instalación contó con un informe de impacto ambiental favorable y que el efluente depurado cumple con los parámetros de la directiva europea para el vertido de aguas depuradas. Dichos estudios se elaboraron después de que la Conselleria de Agricultura y Pesca emitiese un informe desfavorable en 1999 y de que la Autoridad Portuaria emitiese un informe condicionado, un año después.

Además, se concreta que la actividad de la depuradora ha sido objeto de estudio y seguimiento por parte del Centro de Estudio y Experimentación de Obras Públicas (Cedex), de la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar) y del propio Ayuntamiento de Alicante a lo largo de varios años (de hecho, se adjuntan los resultados del Programa de Vigilancia y Control correspondiente a 2016, 2017 y 2018). 

Según la solicitud municipal, en todos esos estudios se ha podido comprobar que "los efectos del vertido sobre las aguas de la dársena no muestran una tendencia hacia el aumento de contaminantes a lo largo del tiempo". E igualmente, se remarca que "no existe actividad pesquera en la ciudad de Alicante" que supuestamente pudiese haberse visto perjudicada y que "no se han registrado afecciones conocidas en materia de pesca" respecto a la actividad desarrollada en otros municipios próximos (Santa Pola o El Campello) a "gran distancia" de la estación depuradora.

Se trata de completar el proceso administrativo todavía pendiente desde que la instalación se puso a disposición del Ayuntamiento

En esta línea, el área de Medio Ambiente da por completado el proceso para regularizar el vertido y plantea que se dé traslado de toda la documentación aportada al Servicio Provincial de Costas para que también concluya el trámite de concesión de ocupación del dominio público marítimo terrestre para la conducción de desagüe de la depuradora.

Por último, el Ayuntamiento confirma su compromiso por seguir impulsando actuaciones de mejora de las instalaciones, así como la posibilidad de reutilización del agua regenerada para uso agrícola o el riego de parques y jardines municipales con el fin de minimizar el vertido al mar "vigilando en todo momento el cumplimiento de los parámetros de calidad tanto del efluente como del medio receptor dentro de los límites estipulados en la ley vigente", como plantea el estudio de impacto ambiental como soluciones de mejora.

En estos momentos, según el proyecto expuesto al público, se reutiliza el 30% del agua tratada, gracias a la introducción del sistema de tratamiento terciario, y la mayoría se destina a la agricultura. El resto se usa para el riego del Parque del Mar, en el Puerto de Alicante, del Parque de Joan Fuster y del Parque de El Palmeral. 

Fuentes de la Conselleria de Transición Ecológica precisaron a Alicante Plaza que, tras superar la fase de alegaciones, se estudiará toda la documentación aportada y se resolverá si procede o no acordar la regularización del vertido. Se da la circunstancia de que varias asociaciones vecinales como Gran Vía Sur o San Gabriel, junto a los colectivos Democràcia en Verd y Amigos de los Humedales del Sur (AHSA), acaban de presentar una queja ante el parlamento europeo por los vertidos de la estación depuradora por lo que consideran un ejemplo de "contaminación crónica", según informó este domingo Radio Alicante.

Por lo pronto, el Ayuntamiento de Alicante aprobó el pasado octubre en Junta de Gobierno la firma del acuerdo de cooperación con la Generalitat y la Entidad Publica de Saneamiento de Aguas Residuales (EPSAR) para la ejecución de infraestructuras de saneamiento y depuración de Alicante, con una inversión de 3.688.013,89 euros, con el que, entre otros puntos, se pretendía "acabar con los problemas de vertidos al barranco de las Ovejas en San Gabriel con lluvias torrenciales y con los olores en la depuradora de Rincón de León para eliminar algunos de los problemas que sufren los vecinos", según precisaron entonces fuentes municipales.

El convenio contemplaba una nueva Estación de Bombeo de Aguas Residuales (EBAR) de San Gabriel y la conexión de la red de pluviales al emisario, además de ampliar de dos a cuatro los digestores para tratamiento de fangos de la Estación Depuradora Aguas Residuales de Rincón de León (al sur del término municipal), renovando los dos parados por obsoletos, que se sumarán a los dos que sí están en funcionamiento, y mejorando el sistema de desodorización para reducir los olores en la zona, según concretaron en ese momento las mismas fuentes.