ELCHE. Las fiestas patronales han vuelto a cumplir un récord de asistencia, con la participación de más de 550.000 personas en los distintos actos y propuestas planteadas durante una semana y media. Al tiempo, han visitado la ciudad casi 20.000 turistas (un 23% más), principalmente de perfil nacional, valencianos y madrileños, y en el ámbito internacional estacan los procedentes del Reino Unido, Francia y Alemania. Unas cifras importantes que hacen sentir orgulloso al equipo de gobierno, aunque el alcalde Pablo Ruz ya avanza que el año que viene implementarán algún tipo de barraca para jóvenes como alternativa al botellón.
Precisamente la decisión de una posición de laxitud que hasta ahora mantenía el Consistorio en parques como el Jaume I para hacer botellón en las fiestas ha finalizado desde este año. El regidor anunció la poco antes del inicio de las fiestas de agosto, y al término de las mismas, destaca que Elche ha tenido unas fiestas "con normalidad y tranquilidad". Ruz incide en que se ha acabado "el mirar a otro lado con el botellón", y apunta que a "por mucha controversia que se haya generado en redes sociales", que llegó al trascender la decisión, "es la decisión correcta". Y ha llegado para quedarse. Añadía también que ha permitido evitar la imagen de basura tras el botellón del día siguiente, "y concentrar esos recursos en limpiar en otras zonas".
En este sentido, el comisario principal de la Policía Local, César Zaragoza, señalaba que el cierre de este parque, punto de reunión y de botellón, "no ha generado un efecto dispersión relevante". De hecho, días atrás, reconocía que les había sorprendido porque sí la esperaban. Aunque las intervenciones han sido similares a las del año pasado, con mil en torno al alcohol, más de 200 botellas decomisadas y más de 600 precintados de establecimientos vendiendo alcohol a menores, sí destaca que "este año hemos tenido menos riñas y altercados, antes los incidentes eran múltiples", explica el Comisario. Indica que es uno de los efectos de haber cerrado este parque.
Ruz apuntaba que "hemos llegado tarde", pero que había que tomar la decisión de cercar al botellón, ejemplificando que "ciudades como Alicante, Murcia o València ya lo han hecho". Ahora trabajarán para esa barraca para jóvenes que plantean como alternativa frente al botellón. Según el alcalde, estará destinada a los menores cerca de los 18 años y hasta los veinteañeros, "con música diferente", aunque aún no ha desvelado, pero sí dejado entrever, que tendrá precios populares. Y sin especificar si se permitirá la venta de alcohol.
Respecto a las cifras turísticas, los datos de afluencia en las oficinas de turismo, este año con un nuevo punto de atención en la Glorieta. En total, aumento del 23% de turistas, desde principio de junio hasta el lunes 14 de agosto. En total, 19.888. Principalmente son turistas nacionales de Comunidad Valenciana, Madrid y comunidades limítrofes, así como los extranjeros proceden de Francia, Reino Unido y Alemania. De hecho, Ruz ha destacado que el vídeo promocional de las fiestas ha tenido 870.000 visionados, desde distintas partes del mundo.
En ocupación hotelera los datos que facilita AETE, son similares a los de al año pasado, con una ocupación muy alta y prácticamente lleno los días de fiesta. El acumulado entre enero y junio roza el 80%, siete puntos más que en 2022. Por lo que se refiere a asistencia a las actividades, los datos se mueven también en parámetros muy similares: 190.000 personas en la barraca municipal, las actuaciones del Hort de Baix con 10.000 asistentes, el Racó Festielx con 70.000, el Gastronómic con 55.000... En total, una media de unas 45.000 personas en las calles a diario, sobre todo con especial afluencia los días 13 y 14 de agosto.
En cuanto a la polémica por las barras, que provocaron un duro comunicado de la Asociación Hostelería Elche, el alcalde se muestra tajante: "Se han autorizado barras del 11 al 15 de agosto, y quien diga lo contrario miente". Asevera que se han autorizado todas las solicitadas "salvo aquellas por cuestiones técnicas, no todo puede ser una macrobarraca" y que se han abierto las mismas barras y lugares de gastronomía que el año pasado, "con un equilibrio entre el tráfico y las fiestas", apuntaba. El alcalde asegura que se tomó la decisión permitiendo el tráfico en Maestro Albéniz al mediodía, que ya quedaba cerrado tras la batalla de flores del 12 de agosto, además de cerrarla por la noche "y dos días más". Ruz recuerda que la decisión no ha sido política, sino "técnica, de la policía, y algunos hosteleros nos lo han agradecido". Aunque en algunos negocios generó quejas porque se enteraron horas antes del montaje de la barraca que no podían abrir a mediodía.
El regidor arguye que "cerrar el tráfico en tres arterias al mediodía el año pasado fue un error", decía respecto a la gestión del anterior bipartito, defendiendo que era necesario dejar abierta la calle para mantener el tráfico en el eje Este-Oeste de la ciudad. "Cuando se trasladó la mascletà de Traspalacio a la avenida de la Libertad se cortó una vía de tráfico importantísima en la ciudad y había que abrir una que la sustituyera", explica, añadiendo que hasta que esto tuvo lugar, se podía tener cerrado Maestro Albéniz porque se podía circular por la Avenida de la Libertad.
Por último, Ruz da las gracias a los más de 3.000 efectivos que se desplegaron en Elche, juntando Protección Civil, Bomberos y Policía Local, que tuvo un gran despliegue durante actos nocturnos para prevenir el botellón, también con los drones. "Han estado al pie del cañón para que todo haya salido bien", decía, teniendo palabras también para los centros de salud y los dos hospitales públicos, así como a las entidades festeras "que vertebran el municipio y tienen una labor social".