Hoy es 30 de diciembre

pimesa contempla la opción de demoliciones escalonadas de los viejos bloques

Avanza la renovación de San Antón en Elche: próxima entrada de 40 familias en el nuevo bloque

16/10/2024 - 

ELCHE. Mientras que este martes las miradas estaban puestas en San Antón por el incendio en uno de los bloques, que supuso su desalojo junto a uno contiguo, el Arru (Área de Renovación y Regeneración Urbana) sigue adelante. Como avanzaba el alcalde Pablo Ruz, en el próximo consejo de administración de Pimesa se aprobará el pliego de condiciones para la comercialización de las viviendas del nuevo cuarto bloque. A él entrarán unas cuarenta familias del bloque 6, uno de los antiguos. Al tiempo, la empresa municipal se está planteando otras cuestiones vinculadas al proyecto, como la posibilidad de demoler cada inmueble conforme los reciba, sin esperar a la entrega de los cuatro primeros.

Así, en el próximo Consejo se aprueba el pliego de condiciones para licitar la comercialización. Será este documento el que de termine de qué forma entran las cuarenta familias, ya que al ser viviendas de distinta tipología, cada una puede elegir lo que más le convenga, también según el precio. Hasta ahora han coincidido el número de viviendas de los edificios construidos con las familias a alojar de los antiguos bloques, pero en este caso hay 54 viviendas. Más pisos que familias tiene el edificio 6. 

Así que una vez estén cubiertas las cuarenta viviendas reservadas, quedarán catorce vacías a destinar según necesidades. El pliego tendrá que abordar también esta cuestión. Y como con las cuarenta primeras, en cada caso se tendría que estudiar si no hay capacidad de compra, para buscar soluciones como la del alquiler asequible empleada en anteriores inmuebles comercializados. El inmueble en cuestión está finalizado, tan solo queda recepcionar tras ajustar algunas cuestiones administrativas.

Demoliciones individualizadas de los viejos bloques

Asimismo, otra de los aspectos de este Arru es el de las demoliciones de los viejos bloques, y cuyas previsiones se han ido alargando. Son los viejos edificios del 11 al 14, sobre cuyos solares se tienen que construir los de las nuevas fases. A diferencia por ejemplo del 6 que se realojará ahora en el último bloque, en cuyo solar irán dotaciones públicas.  

Mientras que la idea original era demoler a la vez los cuatro bloques, como el proceso administrativo se está alargando, desde Pimesa se va a estudiar la posibilidad de que se vayan derruyendo según se entregan. Porque aparte de que estén vaciados o no al completo, también hay que esperar a que esté resuelto finalmente el proceso expropiatorio (para adquirir el suelo y la vivienda vieja), ahora en marcha. 

Tres casos por realojar y algunas ocupaciones

La otra derivada siguen siendo los casos contados de realojo pendiente. Con derecho a entrar a los nuevos pisos actualmente hay tres familias. Una de ellas ya tiene el acuerdo para entrar en uno de los nuevos con un alquiler asequible, pero necesita el dinero de la expropiación para poder salir del inmueble. Se firmará el acta y se irá a la que tiene reservada para el alquiler. Los otros dos casos son más costosos, puesto que son de los que los propietarios venían manifestando que no querían abandonar la vivienda. Uno de ellos no se ha pronunciado en el proceso expropietario y el otro sí lo ha hecho, alegando al trámite de avenencia al no estar de acuerdo con el expediente. 

Por otra parte, aparte de esos tres casos, hay otros tres/cuatro casos de ocupaciones ilegales, una de ellas se resuelve dentro del proceso de expropiación, al ser una situación antigua. Los otros sí que están en vía judicial, alguna denunciada por el propietario y a la espera de la ejecución del desahucio, otra pendiente de juicio. No pueden alegar nada con respecto a los otros casos porque no tienen por tanto derecho para las nuevas viviendas.

Por otro lado, en el expediente expropiatorio, ha habido once no avenencias y que por tanto se tienen que resolver tras no llegar a un acuerdo. Corresponden a once viviendas de los viejos inmuebles que están vacías con derecho a nuevo piso, pero no firmados por diferente casuística: pueden no interesar en este momento porque hay hipotecas o cargas por en medio, herencias no formalizadas, por ser propiedad de alguna empresa... Con esta situación, se tendrá que contratar una nueva tasación para que surja de ahí un justiprecio de compensación. Si el día estipulado no se presentan para cobrar, el dinero se depositará en un depósito de expropiaciones para que lo hagan más adelante, cuando vena conveniente. El resto de las expropiaciones sí se están firmando con acuerdo, pago y acta de toma de posesión. 

Como se ve, un proceso largo y costoso por las diferentes situaciones que hay en el barrio. De ahí que Ruz este martes incidiera en que hay que ir acelerando ya con Ministerio y Generalitat, a raíz del incidente de este lunes por la noche, porque aún quedan por hacer dos de las tres fases previstas para la renovación del barrio al completo.

Noticias relacionadas

next
x