ELCHE. La reprogramación del Museo de Arqueología e Historia de Elche (Mahe) trae cola. Como ya adelantó este medio, la iniciativa planteada va más allá de la reforma de tan solo tres salas, la X, XI y XII, que se quiere destinar a salas de exposiciones temporales para destinarlas a acoger posibles grandes colecciones. Propone un nuevo discurso, que incluye novedades como la entrada por la Casa del Gobernador o rehabilitar el Paseo de Ronda, pero también deja sin concretar cuándo se podrían recuperar algunas de las salas que se propone recoger. Por ello desde, el Partido Popular entienden que lo que se quiere hacer "es desmantelar el museo de forma injustificada", señala Pablo Ruz.
"Hemos sabido que el equipo de gobierno se plantea desmontar, desmantelar por completo, la parte de historia del MAHE, para sin definir cuándo, trasladar toda esa parte, pues está compuesto por ese ámbito y el arqueológico, y sin concreción de fecha, sine díe, determinar dónde irán a parar restos y elementos que explican la historia desde hace mil años". Esto en referencia a que los objetos y documentos expuestos en las tres salas, se devolverán al almacén, para que en un futuro, en cuanto estén finalizadas las obras, se trasladen a la actual sala de exposiciones, para lo que no hay ningún plazo en el informe elaborado por el director de museos, ahora en excedencia.
"Nos parece un verdadero despropósito, un museo que desde 2007 se ha convertido en una referencia para interpretar la historia de la segunda ciudad de la provincia, capital cultural de la provincia, y con posiblemente el yacimiento íbero más importante de España", explica Ruz, quien contempla que los 2,4 millones en los que se ha planteado la obra para las próximas tres fases, "pedimos que se convierta en el montante para salvar Las Clarisas, eso es gestionar el dinero público con cabeza. No solo no es necesario desmantelar el museo de historia de la ciudad, sino que es profundamente criticable hacerlo para no se sabe exactamente qué".
Por último, el portavoz incide en que hace falta actuar en el Palacio Altamira, "es un hecho", como reconoce también el informe a nivel de desprendimientos —hace unos días se valló el entorno de la torre— de tapial o humedades. "La Torre del Homenaje debe ser accesible, debe ser conocida porque es uno de los grandes miradores de la ciudad, hay problemas de filtraciones que también son reales", dice Ruz, quien añade que también se puede abrir la puerta primitiva que daba al río, la puerta Oeste almohade, "para poder dotar de mayor interpretación al Palacio, pero desmantelar todas las salas de historia es un verdadero despropósito de un equipo de gobierno que ha perdido el norte en cuanto a la gestión y establecimiento de las prioridades". A su juicio, lo que es prioritario es "abrir la torre de Vaíllo, rehabilitar el Molí del Real, la Calahorra o Santa María. Solamente hay un responsable, el PSOE de González", denuncia, y plantea por qué quieren emprender esta reforma "sin asesoramiento o consultar a los expertos que promovieron la construcción del museo".