Los hoteles de Alicante se preparan para un otoño de resistencia y solo prevén cierres puntuales

ALICANTE. Los hoteles de la ciudad de Alicante, así como el conjunto de los establecimientos de costa y del interior agrupados en la Asociación Provincial de Hoteles de la Provincia (APHA), están decididos a mantener sus puertas abiertas durante el próximo trimestre. Salvo casos muy concretos, el 100% de los que volvieron a la actividad tras el proceso de desconfinamiento (es decir, prácticamente todos, a diferencia de lo que sucedió en otros destinos) permanecerán disponibles para recibir la llegada de huéspedes. 

Eso sí, se asume que la demanda quedará muy ligada al comportamiento del resto de la economía, por lo que respecta a las visitas de negocios, por ejemplo, así como a las reservas de última hora que dependen fundamentalmente del turismo de escapadas. Un segmento que depende de que se mantenga la confianza del turista nacional, que permita que siga apostando por pasar un fin de semana en Alicante, siempre que se contenga el número de contagios y no se restrinja la movilidad entre provincias.

Fuentes de APHA consultadas indicaron que, por el momento, solo se ha registrado algún cierre puntual con una duración temporal, como el del Hotel Alberola, que incluso estaría sopesando la posibilidad de volver a abrir en el mes de octubre ante la expectativa de tener que atender un pico de reservas relacionado con el desarrollo de un evento empresarial todavía por confirmar.

Otros grupos que operan varios establecimientos en la ciudad, como Hoteles La City, han decidido canalizar a sus clientes en un único hotel para optimizar recursos. Y, por último, también existiría algún caso particular, como el del hotel AC Elda, que aún no ha llegado a reanudar su actividad desde el fin de las restricciones asociadas a la declaración del estado de alarma.

El resto de los establecimientos prevén resistir, conscientes de que el porcentaje de clientes continuará muy por debajo de los índices registrados en los últimos años, aunque sin que se baraje un cierre masivo. Todo, salvo que la evolución de la pandemia del coronavirus empeore y se regrese a un escenario de confinamiento. Lo cierto es que las expectativas continúan sin ser tan malas como se había augurado en un principio, como sucedió en el arranque de la campaña de verano, que se está consiguiendo superar con ocupaciones medias por encima del 50% en los establecimientos urbanos y de entre el 60 y el 70% en el litoral.