ALICANTE. La tercera fase de la remodelación del paseo de La Explanada de Alicante reservará el nuevo espacio peatonal generado en su entronque con la avenida de la Rambla como zona para el desarrollo de conciertos, representaciones, actos relacionados con las fiestas o exposiciones al aire libre. Esa es, cuando menos, una de las propuestas planteadas por los gabinetes de arquitectura que han resultado preseleccionados para asumir la redacción del proyecto constructivo de las obras. En concreto, la Mesa de Contratación del Ayuntamiento de Alicante acordó este miércoles elevar la propuesta de adjudicación de ese contrato a la UTE compuesta por Escalar y Guía Consulting SLP, con una oferta de 70.785 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses, después de que se haya certificado su viabilidad.
Fuentes municipales consultadas indicaron que en la elección de dicha UTE ha primado la valoración técnica por lo que respecta a la idoneidad de las soluciones sugeridas para llevar a cabo la peatonalización de ese último tramo del paseo. Con esa baremación, Escalar y Guía Consulting obtuvieron 93,25 puntos frente a los 88 logrados por la oferta alternativa que registró Ingeniería y Estudios Mediterráneos, como informó Alicante Plaza a principios de septiembre.
El proyecto afecta un recorrido lineal de 650 metros comprendido entre la calle Bilbao y el final de la Rambla con el que se pretende configurar un trazado en continuidad de todo el paseo. De ahí que uno de los principales cambios que conllevará la actuación propuesta sea la supresión del paso de vehículos y autobuses del servicio de transporte público urbano, que pasarán a disponer de una nueva parada en la Rambla.
Con todo, no será la única modificación prevista para ese ámbito. La oferta registrada por Escalar y Guía Consulting plantea integrar los aliviaderos de aguas pluviales situados en la confluencia entre la Rambla y la Explanada en una especie de surtidor ornamental similar al que ya existe en la Plaza de España. Además, propone que sirva como base para situar un hito escultórico todavía por coordinar con el Ayuntamiento.
La pretensión de la Concejalía de Urbanismo es que los presupuestos de 2022 incluyan la consignación de fondos necesaria para ejecutar las obras
De igual modo, entre las novedades sobre el diseño del nuevo tramo peatonal se propone la mezcla del pavimento utilizado en las fases I y II del paseo con las características teselas de las que se compone su franja central, con el propósito de favorecer la integración entre las dos zonas del que pasa por ser uno de los principales escaparates turísticos de Alicante. Por último, ese nuevo tramo peatonal quedará libre de la instalación de veladores, ya que no preexisten negocios hosteleros en su entorno. Esa es, precisamente, una de las circunstancias que podría facilitar el futuro desarrollo de las obras, puesto que durante su ejecución no se tendría que parcelar ni vallar con el fin de minimizar posibles perjuicios a establecimientos próximos.
En principio, la previsión con la que trabaja el equipo de gobierno, el bipartito compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs) es que la financiación de las obras pueda incluirse en el presupuesto de 2022 o, en su defecto, en cuanto se incorporen los remanentes heredados de 2021. Como mínimo, según fuentes consultadas, la Concejalía de Urbanismo que coordina el edil Adrián Santos Pérez (Cs), ha incluido la petición de consignación de fondos entre el listado de proyectos de ese departamento a incorporar en las cuentas municipales del próximo año. Con la ejecución de esas obras, se pretendería dar continuidad, además, a las iniciativas para la peatonalización del Centro, entre las que se prevé priorizar el tránsito peatonal y el paso del transporte público en la misma avenida de la Rambla.