ALMORADÍ. Las lluvias de la semana pasada en la comarca de la Vega Baja provocaron una importante subida del nivel del agua alcanzando los 2,70 metros a la altura de Almoradí. En el tramo donde se rompió la mota del río el pasado septiembre debido a la DANA obligó al desalojo de vecinos. La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) ha retomado los trabajos, una vez ha bajado el nivel del agua, de reconstrucción del muro.
Antes de las últimas lluvias, las obras se encontraban en la fase de colocación de la ferralla correspondiente a los alzados del muro, unos trabajos para la reconstrucción de un muro de hormigón armado de 100 metros de longitud. Al subir exponencialmente el caudal, los trabajos se interrumpieron al quedar bajo el agua la base sobre la que estaban trabajando, imposibilitando las labores de operarios y la maquinaria. Al bajar el nivel, han podido retomar los trabajos. El primero que han acometido es el de la limpieza de las zapatas para continuar con el levantamiento del muro.
La fecha prevista en un primer momento, cuando se iniciaron los primeros trabajos en octubre, para la finalización de las obras era finales de abril. Pero en este tiempo, dos temporales han obligado a detener las labores. No solo por el tiempo transcurrido sin poder trabajar sino también por los trabajos extra que han provocado las lluvias. El primer parón importante fue a finales de enero, a causa de la borrasca "Gloria" ya que transucurría un caudal cercano a los 50 m3/s, situación que provocó filtraciones a través del talud de protección. Esto se debió a que estaba parcialmente retirado para poder iniciar la reconstrucción del muro. Desde la CHS aseguraron que dichas filtraciones no suponían ningún riesgo y se produjeron porque el relleno ejecutado durante la emergencia del episodio de septiembre contaba con muchos bolos, necesarios para evitar que fueran arrastrados por el agua. El segundo periodo de parón fue la semana pasada. Con las mismas consecuencias para el ritmo de trabajo, situación que provocará otra demora.
La semana pasada, la alcaldesa de Almoradí, María Gómez, ante la crecida del caudal y las filtraciones criticó el estado de las obras, indicando que las obras no estaban finalizadas en el plazo que desde la CHS se le había indicado. El organismo emitió un comunicado con el objetivo de aclarar que "las obras de emergencia, por su naturaleza no tienen plazo contractual ya que carecen de proyecto".
Desde que se produjo la rotura de la mota y el muro, cada vez que llueve con cierta fuerza salta una alarma de preocupación ante el miedo de que se repitan las escenas de septiembre donde una parte del municipio quedó inundado. Desde la CHS, en reiteradas ocasiones han insistido en que las obras están controladas y las filtraciones que se producen son normales, dado que todavía no está terminado el muro.
Las obras cuentan con un presupuesto estimado de tres millones de euros donde se incluye el taponamiento y la reconstrucción. Esto se une a una partida presupuestaria de 11,5 millones de euros repartidas en trece actuaciones a lo largo de todo el tramo del río Segura en la Vega Baja. De ellas, seis ya se han concluido,