ELCHE. El Instituto Icie (Instituto Ciudad Idea Elche), como observatorio de la ciudad y área metropolitana, también ha presentado alegaciones al Ayuntamiento por la modificación de la ordenación estructural del Plan General por las nuevas recalificaciones de suelo del Convento de la Merced, L'Escorxador y los dos mercados, criticando la falta de profundidad y de análisis en las mismas así como la puerta abierta que dejan a servicios que no proceden en algunos de los enclaves. En global, creen que la modificación propuesta no justifica que cumpla con el interés general "ni realiza un análisis desde un punto de vista global de la ciudad".
Apuntan que se proponen cambios estructurales en la red primaria de la planificación de la ciudad y, sin embargo, no se realiza una revisión desde la óptica de una visión global de las directrices urbanísticas. Asimismo, el documento presentado indica que “tras la modificación se incrementan tanto las dotaciones de la red primaria como las de la red secundaria”. "Es posible que a nivel documental exista dicho incremento, pero en la realidad de la ciudad no se produce tal incremento puesto que son superficies y dotaciones que ya existen como tales en la actual, por lo que no se crean nuevas dotaciones", indican.
A su juicio, un documento que afecta al planeamiento de la ciudad "debe incluir necesariamente un informe de sostenibilidad económica y su correspondiente memoria de viabilidad económica", una cuestión que el alcalde respondía ante los medios hace unos días que no era prioritaria. Por el mismo motivo, consideran desde Icie que "el estudio de alternativas presentado no es suficiente ya que sólo se analiza una alternativa a mantener la situación actual y un estudio riguroso debe ofrecer varias posibilidades de actuación, así como valorar numéricamente cada una de ellas y seleccionar aquella que presente una mayor puntuación".
Proponen que el cambio propuesto para la parcela ocupada por el Convento de las Clarisas, incluya una justificación de la no afección a la ficha de protección del edificio (la actual y la futura cuando se amplíe el BIC a todo el edificio). "También proponemos limitar los usos posibles en el edificio ya que el cambio propuesto a la clave 10 implica que en dicho edificio esté permitido cualquier uso clasificado como 'servicios', por ejemplo, una discoteca o un gimnasio".
Respecto al cambio en la parcela ocupada por el edificio de L'Escorxador proponen que se amplíen realmente las superficies dotacionales de la red primaria y la secundaria "y no sólo a nivel documental, como comentamos antes, pues esa es la única forma en la que la ciudad sí se verá beneficiada con el cambio".
El cambio propuesto en la parcela ocupada por el Mercado Central y la ficha de protección propuesta "es quizás el aspecto que más dudas nos genera", y explican que el Plan General, en sus artículos 13, 14 y 15, "deja claro que todo equipamiento de la red secundaria está sujeto a su área de reparto y este es el caso del Mercado Central". Por eso consideran que la modificación planteada debe "justificar y demostrar la no alteración de los estándares urbanísticos del área de reparto en que se incluye", e inciden en que se pueden encontrar con la misma situación de Clarisas: un "cambio a clave 10 implica que en dicho edificio esté permitido cualquier uso clasificado como “servicios”, por ejemplo y repetimos, una discoteca o un gimnasio".
Por otra parte, advierten que la ficha de protección propuesta para el Mercado Central altera completamente el edificio al eliminar partes importantes del mismo como las fachadas laterales, el forjado de planta primera, la fachada frente a la plaza de las flores o la fachada frente a los baños árabes. "Si realmente la intención es proteger el edificio, la ficha de protección no debería permitir la eliminación de ninguno de los elementos del mismo, manteniendo así, una vez rehabilitado, la fisonomía completa que tenía en origen", y esgrimen que se pueden encontrar soluciones técnicas para mantener la fachada Oeste y visualizar los restos de los baños árabes. "Tampoco está justificada la eliminación de las fachadas laterales en planta baja o el forjado interior de planta primera".
Por ello, desde el colectivo proponen modificar completamente la ficha de protección para que la protección del edificio sea real en todo su conjunto o, en caso contrario, eliminar la ficha de protección propuesta y dejar sin efecto la protección del edificio.
Finalmente, añaden que un cambio en la parcela ocupada por el Mercado Provisional "debería incluir aspectos tan importantes como la autorización de la Confederación Hidrográfica del Júcar al tratarse de un suelo dentro del dominio público hidráulico; la justificación de la afección al Plan de Acción Territorial de las Áreas Metropolitanas de Alicante y Elche; resolver si dicho cambio hace definitivo el edificio existente en la actualidad o bien habría que derruir y construir un nuevo edificio; y, por ultimo, al menos, justificar el impacto visual con el estudio correspondiente ya que el cambio propuesto permite un nuevo edificio con dos alturas".