ALICANTE. Como "el típico partido de Copa, con ambiente, ocasiones, jugadas conflictivas y goles" definía César Ferrando, técnico de La Nucía, el duelo disputado por los suyos ante el Hércules.
El preparador de Tavernes de la Valldigna celebraba "el paso al frente de su equipo", mostraba su convencimiento de que el resultado "les reforzará", felicitaba públicamente a Josema Raigal, el futbolista más determinante de los suyos este domingo, y se deshacía en elogios hacia el conjunto blanquiazul ("Es un gran equipo que nos ha hecho pasar ratos malos") y su afición ("La afición del Hércules ha estado de 10, al lado de su equipo").
Preguntado por la actuación del árbitro cartagenero Fulgencio Madrid Martínez, César Ferrando decía que había "repartido errores". El técnico de La Nucía se refería a la más que posible pena máxima de Truyols sobre Javi Martín, calificándola como "penalti de libro", y reprochaba al árbitro no haber sabido "esperar" en la otra acción en la que el perjudicado fue el Hércules, la jugada de la contra de Raúl Ruiz.
"En los partidos siempre hay cuatro o cinco decisiones arbitrales determinantes, cuando caen para ambos lados se puede decir que que el árbitro reparte", sentenciaba.
Por lo que se refiere a Ángel Rodríguez, de entrada y no obstante la derrota y eliminación de los suyos, el técnico del Hércules hacía una lectura positiva del partido: "El equipo ha hecho muchas cosas positivas [...] nos venía bien probar a jugar con dos puntas, tener que darle un sentido distinto al juego; estamos acostumbrados a jugar con un mediocentro más y eso ha hecho que nos haya costado más la circulación (del esférico) en la primera parte, pero por momentos hemos estado lo intensos que se requiere, con y sin balón".
Para el preparador leonés el encuentro había sido "igualado en el computo global" e identificaba "la sangría de goles encajados" y no los errores arbitrales como causa de la derrota de los suyos: "Teníamos el partido controlado y en una acción aislada nos han empatado", señalaba Rodríguez para, a continuación, lamentar el error en la salida del balón de Truyols que condujo al 2-3. "Cuando seamos capaces de ajustar todo eso, no conceder ocasiones, el equipo va a mejorar y va a ganar [...] mientras, tendrá que hacer muchas más cosas bien que sus rivales para hacerlo", apuntaba el entrenador del Hércules, que destacaba "la conexión del equipo con la grada", hasta el punto de reconocer que sopesa jugar los partidos como local los domingos por la mañana porque aquella "está un poco más enchufada".
En cuanto a la actuación arbitral, Rodríguez calificaba como "totalmente injusta" su expulsión ("Hay una falta a Cedrés justo al lado mío y digo falta"), de la que hacía responsable al asistente: "Ni el árbitro ni el cuarto árbitro tienen la culpa"). El técnico blanquiazul se quejaba de un manotazo de Mariano Sanz a Raúl Ruiz que entendía que era merecedor de roja y, como ya había hecho Ferrando, lamentaba "el error de bulto" del árbitro por su "falta de pausa" en la jugada en la que los suyos se vieron perjudicados por la no aplicación de la ley de la ventaja (una jugada con 2-3 en el marcador, en la que 'Alvarito' encaraba la portería contraria) y era claro sobre la ilegalidad del cuarto tanto del rival: "Es fuera de juego claro", sentenciaba.