El alcalde de Alicante, Luis Barcala, y la vicealcaldesa, Mari Carmen Sánchez, en la mesa presidencial del pleno, en imagen de archivo. ALICANTE. Los dos partidos aliados al frente del Ayuntamiento de Alicante, Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs), tratan de cuadrar números para promover una segunda modificación de créditos sobre el presupuesto de 2022 con el objetivo de incorporar parte de los ahorros municipales generados durante los ejercicios de 2020 y 2021 para impulsar un nuevo paquete de inversiones encaminadas a renovar la escena urbana de la ciudad. La pretensión del equipo de gobierno es que ese nuevo ajuste en la contabilidad municipal -el primero se aprobó en abril para consignar la parte de los fondos que corresponde asumir al Ayuntamiento en proyectos cofinanciados por la UE- pueda elevarse a la consideración del pleno en la sesión ordinaria del mes de mayo o, en su defecto, en otra sesión extraordinaria que se convocaría en las semanas posteriores, en la primera quincena de junio.
Así lo ha anticipado este miércoles el mismo alcalde, el popular Luis Barcala, quien ha señalado que el objetivo de esa segunda modificación de crédito es consignar los fondos necesarios para ejecutar al menos parte de las actuaciones que se consideraron prioritarias en la confección de los presupuestos con el requisito de que puedan desarrollarse antes de que concluya el año, en un plazo de poco más de seis meses. Con todo, no ha anticipado qué proyectos o iniciativas concretas podrían incluirse (aunque sí ha señalado que hay áreas como Infraestructuras o Urbanismo que tienen "mucho peso"), ni el importe al que podría ascender ese cambio presupuestario entre los 80 millones de los que se dispondría tras el cierre de la liquidación del presupuesto de 2021.
"Estamos trabajando en esa modificación; terminando de cerrar esas cifras, e intentamos llegar a este pleno de mayo con esa modificación sobre la mesa", ha señalado. "Si no en el ordinario de mayo, en un extraordinario inmediatamente posterior", ha enfatizado. Así, ha recalcado que "ya tenemos el trabajo adelantado en la oficina presupuestaria" y ha añadido que "no es necesario" agotar el remanente disponible. "Hemos priorizado sobre todo las inversiones que requieren más plazo de ejecución y parte de gasto corriente; no descartamos que vayamos haciendo más modificaciones en función de las necesidades que se vayan planteando", ha abundado.
Respecto a la tramitación de ese ajuste contable, no ha confirmado que vaya a abordarse una nueva ronda de conversaciones con el conjunto de grupos políticos que conforman la oposición: PSOE, Unides Podem EU, Compromís y Vox. "Los remanentes son consecuencia de lo que se habló en la negociación con los presupuestos; que nadie se llame a sorpresas, con quien no apoyó los presupuestos también se había hablado y se habían abordado, y estarán en los remanentes; lo que hablamos en su momento, se va a cumplir", ha insistido. "Si votan que no, pues es su problema; no tengo ninguna confianza en que se cumpla con lo que se había hablado previamente, pero se recogerá lo que se había hablado y se había incorporado en muchos casos con un euro porque lo que se había hablado era financiarlo con remanentes", ha apostillado.
De igual modo, ha subrayado que la modificación de crédito va enfocada fundamentalmente a inversión "no a gasto corriente", por lo que no ha contemplado la posibilidad de que puedan incrementarse las partidas asignadas a concejalías como Cooperación o Igualdad, que se vieron reducidas en la confección del presupuesto. "Creo que no vamos a tocar prácticamente nada del gasto corriente salvo algo que habíamos dejado expresamente fuera del presupuesto con alguna de las áreas, como Fiestas, que había quedado pendiente por completar", ha señalado. En todo caso, ha apuntado que "cuando veamos el montante total, daremos un repaso para ver hasta dónde llegamos".
Al tiempo, se ha referido al pago de las aportaciones que corresponden al Ayuntamiento de Alicante en Casa Mediterráneo para asegurar que se abonarán en cuanto sea posible. Al respecto, ha señalado que quien reclama ahora la cobertura de esos pagos no los asumió en su momento.
Por su parte, el secretario general del PSOE de Alicante, Miguel Millana, ha calificado de "aberrante" el acuerdo promovido por el equipo de gobierno para contratar un préstamo de 20 millones con el fin de financiar nuevas inversiones "cuando existe un remanente de más de 100 millones de euros en la caja municipal". Millana ha señalado que tenemos al alcalde Barcala como el gran gestor de las finanzas municipales: devuelve préstamos por 19 millones de euros cuando nadie le exige la devolución, perdiendo 2,1 millones de euros de subvenciones, y ahora endeuda a la ciudad por diez años con 20 millones de euros, cuando dispone de más de 100 millones de euros en los bancos. ¿Quién puede entender esta aberración?".
En esta línea, ha señalado que "a la ineficacia grave en la realización del gasto comprometido en los presupuestos, le llama sin vergüenza ninguna, ahorros. Resulta ahora que ser un pésimo administrador de las cuentas municipales es un mérito". "Nuestra rancia derecha que presume de liberal es así. Objetivo: engañar a las personas preocupadas por los asuntos públicos, a la vez que tomarnos el pelo o intentarlo, como si fuéramos tontos".
