ELCHE. Hace más de medio año, el alcaldable del Partido Popular, Pablo Ruz, presentaba su gran proyecto para la ciudad, el Centro de Artes y Cultura de Elche (Cace), una infraestructura que anunció financiaría la Diputación de Alicante para albergar a más de mil personas, y cuya ubicación estaría en el aparcamiento de Candalix. Algunos meses después, el presidente de la institución, César Sánchez, de su mismo partido, recogía el guante pero ofrecía el proyecto a la ciudad y mostrando una imagen de 'mano a mano' con el alcalde Carlos González, que al caerle del cielo, no dudó en coger tamaño regalo: la mayor inversión de la Diputación en la ciudad. En la jornada del jueves, como había adelantado este medio, se hacía oficial: la Diputación sufragará el proyecto pero el Ayuntamiento pondrá los terrenos. Eso sí, en la foto oficial no salió Ruz.
Un error de comunicación o falta de coordinación. Todas las opciones están abiertas de puertas hacia afuera, pero la realidad es que como mínimo, sorprende la gestión que se ha hecho del proyecto, teniendo en cuenta que no es una cuestión menor y que el primero que habló del mismo fue el PP local y su alcaldable Pablo Ruz, y que el presidente de la Diputación es compañero de formación. Se esperaba que le echara una mano y adoptara una actitud más proselitista, pero al hacer el ofrecimiento en abstracto a la ciudad de Elche, rápidamente al alcalde Carlos González recogió el guante para pedir una reunión y avanzar en el tema.
Diseño presentado por Ruz
Diseño presentado por RuzA pesar de los contactos, la reunión tuvo lugar el jueves, en la que como estaba previsto, Elche ofrecerá los terrenos para el Auditorio, a cambio de que la Diputación ponga el dinero. Y así será. Un anuncio que se hizo oficial a final de la mañana, tras el encuentro entre ambos, en la que el alcalde logró colgarse la medalla con la foto junto a Sánchez y así es como lo intenta vender. Algo que no podían permitir desde las filas populares, ya que fue Ruz quien lanzó la idea del proyecto, incluso con una propuesta de diseño —que ahora decae, porque será un concurso público de ideas—, por lo que casi a última hora de la tarde acudieron a la Diputación para lanzar el mensaje junto a Sánchez como compañero de partido. Para evitar dudas.
En ese sentido, desde el PP argumentan que como presidente de la institución debe mantenerse 'imparcial' y no puede alabar en esa calidad el proyecto de Ruz —lo cual es cierto—, pero no ha sido hasta ahora, tras la reunión con el primer edil ilicitano, cuando se ha corroborado la operación, pudiendo haberlo hecho con meses de antelación, para dejar claro de quién es el proyecto y para evitar dar espacio a rivales. Al menos a nivel mediático. Cuando se habló del proyecto entre ambos munícipes, el alcaldable del PP quedó difuminado. De hecho, el alcalde sostiene que habló de esta infraestructura meses antes de que el candidato popular lo diera a conocer.
El presidente de la Diputación con Pablo RuzSea como fuere, y a pesar de las fotos, la realidad es que parece que el segundo auditorio provincial será una realidad en Elche, a falta de plazos. Sobre el lugar, no parece tan claro que vaya a ser en la zona de Candalix porque González tiene sus dudas. Sobre el diseño, se hará un concurso de ideas mediante una inversión de 200.000 euros. Por si acaso, y aunque Sánchez anunció la creación en una comida del Rotary Club sólo dos días después de la presentación del candidato azul, Ruz ya marca distancias con el alcalde, poniendo en valor que hace más de un año que llevan trabajando en esta infraestructura. “La idea es contar con un auditorio que sea foco de atracción de toda la zona, con más de 1200 plazas, aparcamiento y programación estable".
Por su parte, González apunta que posicionará nacional e internacionalmente la ciudad y será un importante elemento dinamizador de la actividad cultural y económica”. Sobre un posible emplazamiento, el alcalde ilicitano señala que se están estudiando diferentes alternativas: "la elección debe ser el resultado de un proceso de reflexión a nivel local y de consenso con los agentes sociales y económicos de la ciudad”. Por su parte, la Diputación de Alicante designará un comisionado que se encargará de coordinar las fases del proyecto. Asimismo, se constituirá una Comisión Técnica integrada por ambas administraciones. Ahora que ya parece que la cosa va en serio, falta ver algunos aspectos como la inversión, los tiempos, la ubicación, y la posible demanda, programación y mantenimiento que pueda tener. Estos últimos temas relacionados entre sí y no menores en una comunidad como la valenciana después de años de grandes obras.
