ALICANTE. El Juez de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha resuelto que el encuentro Hércules-Lleida se dispute el miércoles 19, desde las 17 horas en el Rico Pérez.
El choque, aplazado la semana pasada por un positivo por Covid-19 en el vestuario ilerdense (este martes se detectaba un segundo) y que debía haberse jugado el sábado día 1, se disputará a cuatro días de la última jornada; lo anterior después de que el Juez de Competición, Alberto Peláez Rodríguez, haya desestimado la solicitud de ilerdenses y alicantinos de jugar el fin de semana del 22 y 23 y, en consecuencia, retrasar la última jornada.
"Una vez analizado el calendario de la competición y la fecha más cercana disponible en el tiempo", el Juez de Competición ha resuelto lo anterior que, al menos, evita que el equipo de Manolo Díaz tenga que jugar cuatro partidos en 11 días: no tendrá compromisos entre el choque de Badalona (el sábado 8 a las 19 horas) y el que le enfrentará al Cornellà (el sábado 15 en el Rico Pérez).
Salvo que haya más aplazamientos...
No obstante, lo anterior, el que la última jornada se retrase, sigue siendo posible si alguno de los encuentros de sexta y séptima es también aplazado por positivos (esa es la voluntad expresada desde Las Rozas).
Jugar un miércoles a las 17 horas, otra broma desde Las Rozas
Por cierto, al igual que el día de disputa, Competición también ha fijado las cinco de la tarde como hora de inicio, algo que no ha gustado al Hércules, puesto que le va a restar afluencia al choque.
El duelo aplazado con la Llagostera lo programó para las 17 horas de este miércoles para evitar coincidir con los partidos de la Champions (especialmente con el Chelsea-Real Madrid), pero en la fecha elegida para jugar el duelo con el Lleida no existe ese condicionante. Además, Competición tampoco ha tenido en cuenta el calor que hará en Alicante ese día a esa hora. Un desastre tras otro.