Así sería el aspecto de Porfirio Pascual en Elche tras la rehabilitación integral con fondos europeos

ELCHE. La pasada semana empezaron las reuniones entre vecinos del barrio de Porfirio Pascual en Carrús Este junto con la concejalía de Urbanismo y el medio municipal Pimesa, que es el encargado de elaborar el proyecto de rehabilitación, accesibilidad y eficiencia energética con el que se quieren captar fondos europeos Next Generation EU para acometer esta ambiciosa intervención. Se ha calculado un coste de 13 millones de euros, de los cuales Europa aportaría 9,4 millones de euros, el Ayuntamiento 1,9 (la cifra máxima para obtener todos los puntos) y la Generalitat Valenciana 600.000 euros. Por su parte, los propietarios de cada vivienda tendrían que aportar aproximadamente 7.200 euros en 15 años. Una cantidad que ha variado respecto a los 9.000 mencionados hace un par de meses, aunque no está cerrado. 

Cuatro ejes: estructura, ascensores, eficiencia y reurbanización

Como ya se había planteado, esta convocatoria de concurrencia competitiva está centrada sobre todo en lograr el 60% de eficiencia energética en los edificios de barrios vulnerables o que necesiten una gran rehabilitación, como es el caso. La actuación constaría de cuatro ejes. A nivel estructural se reformarán pilares y viguetas de cada inmueble, así como otras instalaciones comunes de servicios, retirada de amianto y los balcones. Aunque lo más llamativo tendrá lugar en la parte visible de los edificios, ya que se pretende instalar ascensores en los exteriores de los 18 inmuebles del barrio, lo que sería la actuación para accesibilidad; mientras que en cada inmueble se repararían las fachadas, con recubriciones de otros materiales que permitan mejorar esa eficiencia energética y aislamiento y sustituir las cubiertas, en las que se instalarían placas solares. Presentarían un aspecto totalmente diferente al actual.

Paralelamente, en el último eje se actuaría para reurbanizar el entorno, sustituyendo el alumbrado, el viario y restituyendo o creando zonas verdes. Para explicar todo ello específicamente se ha tenido reuniones con vecinos de todos los inmuebles en seis sesiones. Son 18 edificios, 40 comunidades de vecinos (aunque no todas las escaleras están constituidas en comunidades, por lo que tendrán que hacerlo) y 302 viviendas. También entran en la reforma los 18 locales que hay en los bajos. Dependiendo de si son locales, plantas bajas o plantas en altura, cada una de ellas tendrá un coste de actuación, aunque el precio mayoritario será el de las plantas en altura, que es el que asciende a esos 7.200 euros. En el caso de familias vulnerables, ese coste se reducirá hasta aproximadamente los 2.200 euros. Todo a pagar con posibilidad de préstamos a 15 años.

Actuación que debe estar finalizada en junio de 2026

Eso sí, no se realizarán actuaciones de rehabilitación concretas en cada piso, sino que los fondos son para estas cuestiones estructurales ya que como explica el regidor Carlos González, "los inmuebles cuentan con deficiencias o patologías severas fruto del paso del tiempo y de la calidad de los materiales constructivos". Independientemente de que el Ayuntamiento va a presentarse a la convocatoria, para lo que tiene de plazo hasta el 20 de junio, a su vez los vecinos de cada edificio tienen que votar si participan o no en la misma, para lo que se exige mayoría simple. Aquellas escaleras que no estén constituidas como comunidad se comunicarán con la administración a través de un portavoz.

Por último, antes de las posibles intervenciones, el Ayuntamiento realizará el Informe de Evaluación del inmueble con una inspección técnica de cada vivienda, para lo cual ya tiene el permiso que ha gestionado Pimesa. Mientras que tengan lugar las obras, que tendrán que estar finalizadas el 30 de junio de 2026 por exigencia de la convocatoria europea, no hará falta el realojo de los vecinos de sus casas. El alcalde ha señalado que se podría dar el caso de que algún inmueble no entrase, pero no contemplan esta opción ya que se trata de una rehabilitación "con fondos excepcionales a un precio asequible". Una actuación ambiciosa que la conselleria de Vivienda también priorizó, aunque eso sí, a la convocatoria concurren los 500 municipios de la Comunitat para un fondo total de 90 millones de euros.