CALP. Ana Sala, alcaldesa en funciones de Calp, está negociando con los partidos de la izquierda de la localidad para impedir un gobierno del Partido Popular, partido con el que ella entró como primera edil en 2019. Sala accedió al cargo tras la marcha de César Sánchez al Congreso y tras los comicios de hace cuatro años obtuvo la alcaldía con el apoyo de Ciudadanos.
Hace unos meses el PP informó de que el candidato en Calp volvía a ser Sánchez, lo que generó un terremoto político con cese de ediles y de personal de confianza apartado por parte de la alcaldesa. Sala formó su propio partido con gente de Ciudadanos, como el edil Juan Manuel del Pino, que ha gestionado Urbanismo estos cuatro años.
Somos Calpe, el partido de Sala, ha dado una sorpresa en Calp al obtener seis concejales, mientras que el PP de Sánchez ha logrado ocho. La mayoría absoluta en esta localidad está fijada en once ediles, por lo que Sala ha afirmado que va a “por todas” y quiere la alcaldía. El cargo para ella es innegociable, pero quiere acuerdos con los partidos de la izquierda.
Todos ello suman los siete ediles necesarios para una investidura que podría dar a Sala la alcaldía en una primera votación. Pero, la propia candidata ha explicado que tiene a personas negociando con cada partido con los que quiere un acuerdo. El trabajo puede resultar fácil para Sala ya que todos los partidos son de izquierdas y, en principio, no querrían al PP en la alcaldía.
El PSPV sacó tres ediles, mientras que Compromís y Defendamos Calpe, dos cada uno. La idea de Sala es un pacto entre todos para impulsar políticas que beneficien a la ciudad y que todos los partidos aporten sus ideas y se cumplan sus propuestas. Pero desde desde Somos Calpe tienen la vista especialmente en una formación, en el PSPV.
Si en la sesión de investidura, los socialistas votaran la candidatura de Ana Sala, sólo con que el resto de partidos votaran a sus propios candidatos, la alcaldía sería para la todavía alcaldesa. Este es un punto importante, pero Sala ha dicho que su intención es un acuerdo con todos para evitar una alcaldía del PP. A esto ha agregado que el acuerdo tiene que basarse en “la responsabilidad, el trabajo y la transparencia”, como ella ha sacado adelante esta legislatura.
Por otro lado, Sala no ha escatimado en reproches a su partido: “Sé qué formas de trabajar tienen y sé que harán cualquier cosa por lograr la alcaldía, por eso estoy preparada para cualquier cosa”. A todo esto ha añadido que no puede hacer nada más que luchar por la alcaldía: “Las 1.844 personas que nos han votado lo merecen”. Finalmente ha dicho que hay que acabar ya con estos seis meses de alboroto que no han favorecido a nadie.
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