ALICANTE (EFE/M.G). El PPCV instará al Consell a que “cualquier instrucción que dé a los equipos directivos” de los centros docentes de Secundaria relativa a la ley de Plurilingüismo impulsada por la Conselleria de Educación se consigne “por escrito”. Y además, reclamará que se someta a un votación vinculante el plan que elija cada centro.
Así lo ha adelantado este miércoles, en la sede del PP en Alicante, la presidenta autonómica de los populares, Isabel Bonig, quien ha manifestado también que tanto el conseller como el secretario de autonómico de Educación “piden verbalmente” la implantación de sus proyectos porque, según ha afirmado, son contrarios a derecho. “En la Administración no existen las órdenes verbales”, ha aseverado. “¿Qué creen que es esto, el Parlament de Cataluña?”, ha ironizado.
Esta propuesta se enmarca dentro de una proposición no de ley que el PPCV tiene previsto presentar en el pleno de Les Corts, en febrero, y que Bonig se ha mostrado “dispuesta a debatir” con el Gobierno del Botànic, sobre todo, con el PSPV-PSOE.
A este respecto, ha subrayado que "si los socialistas quieren, el PP estará dispuesto a sentarse y negociar, pero si no, acudiremos a los tribunales” para impedir cualquier disposición de la ley que, según su criterio, sea “contraria a derecho”.
Actualmente, la Conselleria de Educación se ha mostrado dispuesta a flexibilizar la puesta en marcha de la Ley de Plurilingüismo en la comarca de la Vega Baja y ha ofrecido que cada centro elabore un plan experimental y que lo ponga en marcha el próximo curso, que es cuando entrará en vigor el plurilingüismo en Secundaria.
Y si Educación no cumple, la presidenta del PPCV ha adelantado que su partido “pondrá sus servicios jurídicos a disposición de todas las asociaciones de padres y de los equipos directivos escolares para que impugnen todos los proyectos experimentales que sean contrarios a derecho o distintos a la voluntad expresada por los centros a través de la vía contencioso-administrativa”.
Bonig ha sostenido que el modelo lingüístico único que planea Marzà “impone a traición” una inmersión lingüística en “Secundaria, Bachillerato, Formación Profesional y Formación para Adultos”, en la que materias troncales como “Física y Química, Matemáticas, Historia, Geografía o Historia del Arte” se impartirán en valenciano, incluso, ha dicho, “a alumnos previamente escolarizados en castellano”.
A su juicio, este modelo “no tiene en cuenta la realidad social de la Comunitat Valenciana”, ni atiende a la “falta de formación del personal docente”, ni tiene en cuenta “la voluntad de las familias”.
Ha defendido que esta "implantación" se diferencia de la del inglés en que “alumnos que solo daban valenciano como asignatura” en las primeras fases educativas tendrán que estudiar “materias con léxicos técnicos y específicos” en valenciano en las siguientes. “Se cambian las reglas del juego a mitad de partida”, ha asegurado Bonig, “mientras que la implantación del inglés es progresiva y comienza en Educación Infantil”.
Por este motivo, el PPCV presentará la proposición no de ley con la intención de que “se deroguen todos los artículos” de la ley de Plurilingüismo que, según su criterio, “van en contra de la Llei d’Ús i Enseyament del Valencià”.
Además, la proposición incluirá la obligatoriedad de que todas las instrucciones y órdenes se den por escrito. Y, por último, que los proyectos experimentales de la ley se sometan “a una consulta vinculante a los padres”, tengan en cuenta “la evaluación de los alumnos” y se ajusten a una “planificación”, ha continuado la líder popular, “en el que al menos el 30 % de las líneas educativas de cualquier municipio” se imparta en la lengua minoritaria en la zona, ya sea el castellano o el valenciano.
Igualmente, la presidenta del PPCV ha avanzado que su partido apoyará y acudirá a la manifestación en defensa del castellano que varias plataformas han convocado para el próximo día 18. “Defenderemos lo que hemos defendido siempre”, ha recalcado Bonig, quien ha sentenciado: "Los idiomas deben ser elementos de unión, no de confrontación”.
Horas más tarde, el portavoz del PSPV en la Cortes Valencianas, Manuel Mata, ha reprobado la "judicialización de la educación" y las "mentiras" del PPCV en esta materia y ha afirmado que la democratización de la escuela "ya es un hecho que no se puede negar". "Padres, madres, educadores son los que eligen cada día las rutas educativas de sus hijos, lo que demuestra que la democratización de la escuela ya es un hecho que no se puede negar, y las mentiras del PPCV no van a ayudar en nada", ha manifestado Mata.
El vicesecretario general socialista ha destacado que "todas las mentiras del PP en Educación quedan siempre desenmascaradas" y ha asegurado que "no hay una ofensiva contra la libertad de elección, sino al contrario, queda garantizada en España y especialmente en la Comunitat Valenciana".Por ello, ha considerado "lamentable" que se utilice a las niñas y los niños, "se manipule la opinión de los padres y se presenten batallas inexistentes". "Los socialistas confiamos en que no tengamos que lamentar que haya una generación de niños y niñas valencianos que hayan sido víctimas de las ensoñaciones y los planes disparatados del PP de Isabel Bonig", ha advertido el síndic del PSPV.
Mata ha recordado "otras mentiras" que el PP "intentó divulgar sin éxito": "Dijeron que íbamos a eliminar el Bachillerato en la concertada, y hoy sabemos que hay más de 300 centros de bachillerato concertados". Así, ha aludido a "lo que sí está pasando en el sistema educativo" y es que "va a haber una generación de niñas y niños que aprenderán inglés, valenciano y castellano con toda fluidez". "Después de fracasar por la vía judicial en todas sus iniciativas contra el Botànic, ahora pretenden judicializar lo más sagrado, que es la vida de nuestros hijos e hijas, pero volverán a fracasar", ha augurado.
"En la Vega Baja, en las comarcas del interior, en aquellas que tienen la exención garantizada por la Llei d'Ús i Ensenyament del Valencià, no va a haber ninguna modificación", ha afirmado, y ha instado a evitar que la lengua sea "un mecanismo de confrontación". "Tenemos que aspirar a tener uno de los sistemas educativos más potentes porque es la vía que abre las claves del futuro que merecemos", ha concluido.