Foto: MIGUEL LORENZO.VALÈNCIA. Menos de 24 horas habían han pasado entre que el líder de Vox, Santiago Abascal, daba por concluidos los acuerdos en los gobiernos autonómicos con el Partido Popular, provocando el cese del hasta ahora Vicepresidente Primero y Conseller de Cultura y Deporte, Vicente Barrera, y la respuesta de la Generalitat al goteo de salidas. Y es que la marcha del de Vox trae consigo varias consecuencias, la primera de ellas una reestructuración del organigrama que integra de nuevo el área de Cultura en la Conselleria de Educación, liderada por José Antonio Rovira y, por cierto, situando su nuevo apellido en primer lugar, pues el nombre oficial del área pasa a ser Conselleria de Cultura, Educación, Universidades y Empleo. Deportes, por su parte, pasará a depender directamente de Presidencia.
Una vez rediseñado el tablero, toca mover las fichas en una organización en la que hay salidas, entradas y ascensos. El principal movimiento, tal y como anunció el President Carlos Mazón este viernes, es el ‘ascenso’ de hasta ahora Directora General de Patrimonio Cultural, Pilar Tébar, que asume el liderazgo de las políticas culturales de la Generalitat Valenciana como nueva secretaria autonómica. El movimiento no resulta extraño pues, aunque llegó bajo el ala de Vox, nunca se entendió como un ‘fichaje’ del partido de Abascal, más bien lo contrario, como una figura puente entre ambas orillas del gobierno autonómico y el sector profesional. En estos meses, de hecho, ha mantenido un perfil más discreto que sus compañeros, alejada del relato liderado por el propio conseller o Paula Añó, a quien sustituye, centrado en dar “batalla” al “pancatalanismo”.
Aunque situada más bien en un segundo plano mediático, en estos meses Tébar se ha convertido en la cara visible de la gestión de los museos, donde ha sido habitual verla en algunas de las presentaciones, o en patrimonio, uno de los pilares de la gestión de este curso. La gestora cultural, conservadora e investigadora llega a esta nueva etapa, por tanto, sin estar ‘marcada’ por Vox y habiendo esquivado las polémicas que han salpicado su gestión del área. No es el caso de Sergio Arlandis, hasta ayer director general de Cultura, que ha sido cesado.
La salida de Vicente Barrera del gobierno autonómico, más allá de la buena sintonía que tuviera con Mazón, y ascenso de Pilar Tébar dibujan un escenario de futuro, aparentemente, más calmado, en el que palabras como “batalla” o “guerra” acompañadas del apellido “cultural”, habituales en los últimos meses, se irán apagando. No en vano, cuando fue seleccionada como directora general el pasado año para una cierta parte de los sectores de las artes que miraban con recelo el desembarco de Vox en la Conselleria de Cultura supuso una suerte de ‘respiro’, pues no les resultaba una figura desconocida.
Cabe recordar que Tébar fue directora cultural del Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert desde 2021 hasta su nombramiento como Directora General. Además, ha formado parte de las comisiones de los centenarios de Joaquín Sorolla y de Eusebio Sempere por nombramiento de la Generalitat Valenciana y, desde su constitución, del Grupo de Expertos encargado de la selección de obra de arte con destino a la Colección de Arte Contemporáneo de la Generalitat Valenciana. Además, ha sido Vicepresidenta y Presidenta (2017-2021) de la Asociación Valenciana de Críticos de Arte (AVCA).
Con la desaparición de la Vicepresidencia Primera y Conselleria de Cultura y Deporte, por tanto, el gobierno reduce su número de consellerias, que pasan de diez a nueve, un movimiento que hace que la estructura se asemeje más a la de legislaturas pasadas. No en vano, fue el acuerdo entre PP y Vox lo que provocó la creación de la vicepresidencia unida a Cultura, una integración que queda ya descartada.
Con el conseller de Cultura y la secretaria autonómica, queda por definir un segundo escalón que tampoco se ha hecho de rogar. Poco después de anunciar la reestructuración del gobierno, se desvelaron los nombres de los nuevos directores adjuntos que acompañarán a Rovira y Tébar. Será Marta Alonso Rodríguez, que durante los años 2011 y 2015 fue directora general de Cultura de la Generalitat Valenciana, y Miquel Nadal Tárrega, quienes asuman a partir de ahora la dirección general de Patrimonio Cultural y la director general de Cultura respectivamente.
Historiadora del arte por la Universitat de València, Marta Alonso es actualmente miembros del Consell Valencià de Cultura (CVC). Fue con María José Catalá al frente de la Conselleria de Cultura, bajo la presidencia de Alberto Fabra, que Alonso ocupó la dirección general de Cultura de la Generalitat Valenciana. Anteriormente fue asesora de cultura, patrimonio y asuntos europeos e internacionales de la Generalitat.
Por su parte, el escritor Miquel Nadal será quien ocupe la dirección general de Cultura, que hasta ahora ostentaba Sergio Arlandis. Fue en 2021 cuando obtuvo el Premi Lletraferit con su primera novela, Càndid, tras haber publicado varias obras sobre historia política y del deporte, como Document 88, Tradició i modernidad en el valencianisme o El nacimiento de la ciudad deportiva; un libro ilustrado juvenil, Soñar goles, y un dietario personal, Inventari mínim.
El conseller presenta las líneas de actuación del área de Cultura sin grandes novedades y con un foco principal: el patrimonio
