ALICANTE. El Producto Interior Bruto (PIB) de la provincia de Alicante, estimado a través del Indicador Sintético de actividad de la Provincia (ISpA) que elabora la Cámara de Comercio cada trimestre, se incrementó un 11,6% interanual en el cuarto trimestre de 2022 (es decir, comparado con el mismo periodo de 2021). Un dato que confirma la rápida recuperación macroeconómica de la provincia durante el primer año sin restricciones por la pandemia, pero que también apunta ya una ralentización debido al contexto de inflación, pues en el tercer trimestre el incremento había sido 2,6 puntos mayor.
El ISpA, elaborado por el Gabinete de Estudios de la Cámara, realiza una estimación del PIB de la provincia y de los principales sectores de actividad y compara la evolución del PIB provincial estimado con el PIB de España a precios corrientes elaborado por el INE. De esta forma, el ISpA llena una importante laguna en el ámbito de la información macroeconómica provincial, dada la ausencia de publicación de series trimestrales del PIB de ámbito provincial y autonómico y el desfase temporal existente en las series anuales.
En lo que se refiere al cuarto trimestre de 2022, el informe recién publicado por la Cámara de Alicante señala que el PIB a precios corrientes de la provincia de Alicante registró un crecimiento interanual del 11,6%, tasa es inferior a la estimada para el tercer trimestre (14,2%). "La persistencia de elevadas tasas de inflación, a pesar de la moderación de los precios energéticos, el encarecimiento del coste de la financiación y la desaceleración de la actividad económica mundial están provocando una pérdida de dinamismo de la actividad".
"Las ramas de servicios asociadas al ocio y la hostelería siguen liderando el crecimiento", aunque avanzan a un ritmo menor que en el tercer trimestre, según el ISpA, en consonancia con la ralentización del gasto de los hogares. Por su parte, el VAB (Valor Añadido Bruto) de las ramas industriales se debilita. La confianza del sector continúa en niveles bajos, debido a la incertidumbre existente en el mercado y a la inestabilidad económica general que está enfriando la demanda, tanto en el mercado nacional como extranjero. Por último, la actividad constructora "sigue creciendo a un fuerte ritmo" y el sector primario presenta una evolución algo más favorable en los últimos meses del año, tras los descensos de los trimestres anteriores.
En cuanto al año completo, el informe señala que el crecimiento de la economía alicantina ha estado impulsado por el repunte de la actividad del sector servicios, "especialmente en las ramas del comercio, transporte y hostelería", y por el dinamismo de la construcción. En ambos casos, con crecimientos superiores a la media española. El VAB de las ramas industriales avanza a un ritmo moderado que contrasta con el mayor crecimiento del sector a nivel nacional, y el sector agrario cierra el año en negativo, "como consecuencia de la escalada de los costes de producción, el recorte de los recursos hídricos y problemas meteorológicos y estructurales".
Según los resultados de la Contabilidad Nacional Trimestral del INE, el PIB a precios corrientes de la economía española aumentó a una tasa interanual del 7,9% en el cuarto trimestre de 2022, un crecimiento que es 1,4 puntos inferior al registrado en el tercer trimestre. En el conjunto del pasado año, la economía española creció un 10%, un crecimiento que sitúa el PIB español 6,5 puntos por encima del nivel alcanzado antes de la pandemia. Es decir, tanto en el cuarto trimestre como en el año completo, el dato estimado para Alicante mejora en varios puntos el nacional, aunque muestra la misma tendencia de ralentización.