ELCHE. Son una treintena las solicitudes de plantas fotovoltaicas para instalar en el Camp d'Elx, según indicaban desde el Ayuntamiento a vecinos de las pedanías estos días atrás en el encuentro mantenido para informar sobre las iniciativas en marcha. Después de haber pasado el periodo de encuesta de participación pública habitual para que los interesados se pronuncien sobre la misma, llega la parte en la que las firmas solicitan la autorización para la implantación en suelo no urbanizable. En este caso, ahora es el turno de la primera de dos que se quieren instalar en la partida de Altabix, junto a la AP-7 y en el entorno de Bonavista.
En este caso se trata del proyecto promovido por Promociones Franoyfi, compañía que en verano amplió su objeto social para la explotación de este tipo de instalaciones. En la encuesta realizada a principios de 2022 se hablaba de un parque solar de 5 MW, una pequeña instalación dividida en dos plantas, y ahora ha iniciado la consulta pública de esa autorización de una de las dos: 'FV Altabix I', de 3 MW. Supone una superficie de 84.379 metros cuadrados, algo más de 8 hectáreas, pero la ocupación de las plantas solares será de 43.913 metros, casi 4,4 hectáreas. En el caso de esta primera planta, constará de 6.168 módulos fotovoltaicos y la inversión prevista de 1,4 millones de euros.
En el caso de 'FV Altabix II', que aún no está en el punto que la I, la superficie vinculada, la de la parcela, es de 58.257 metros cuadrados, pero la ocupación estricta de los paneles solares será de 28.910 metros. Según los informes que ha presentado la compañía, se ha intentado priorizar la ubicación en terrenos de baja capacidad agroecológica. Sin embargo, "debido a la disponibilidad de los terrenos, la presencia de otras instalaciones, criterios urbanísticos y figuras protegidas, "no ha sido posible situar la PSFV Altabix I en terrenos degradados o con baja capacidad agrícola".
Así pues, se indica que se respetará, en medida de lo posible, la morfología del terreno, como saltos de nivel y ondulaciones, adaptando las estructuras de los paneles al terreno existente. No está contemplada la instalación de líneas aéreas por lo que no se prevé por ejemplo afección a avifauna. También se incide en que la situación está fuera de zonas con riesgo de inundación y peligrosidad, y en general, "no se ha detectado ningún riesgo importante o muy grave, siendo tolerables" los posibles riesgos detectados en cuanto a erosión, seísmos u otros fenómenos. Por otra parte, y en las medidas correctores, se explica que se impulsará la revegetación de áreas de actuación, "que contrbuirán a prevenir el riesgo de erosión por escorrentía. Se favorecerá la colonización de vegetación herbácea bajo la superfice de los módulos, la cual deberá ser sometida a un control de altura para compatibilizar su presencia con el funcionamiento correcto y seguro de la instalación".
Por último, y sobre la cuestión renovable, algunos de los vecinos que se sienten perjudicados por la proliferación de estos proyectos, sobre todo en Santa Anna, se reunían este jueves con la secretaria autonómica de la conselleria de Política Territorial, quien recomendaba la regulación a nivel autonómico y local para clarificar y ordenar estos proyectos. Sobre todo de cara a municipios como Elche donde por su vasto terreno son bastantes las iniciativas en trámite. Por lo pronto, el próximo 25 de enero es una fecha clave porque se conocerá si algunas de las firmas continúan adelante con sus propuestas, dado que caducarán algunos permisos ambientales.