ALICANTE. Nuevo compás de espera para decidir sobre la posibilidad de la celebración de les Fogueres de 2021, después de que se acordase su aplazamiento más allá del mes de junio. La Federació comunicó este miércoles al conjunto de las comisiones y barracas el retraso de la asamblea convocada para este domingo en la que, a priori, debía adoptarse una decisión sobre la posibilidad de acordar un hipotético calendario alternativo, supeditado a que la Generalitat pueda autorizar su desarrollo. Y en ese caso, cuáles serían sus fechas concretas, en una horquilla que podría extenderse desde finales de agosto hasta mediados del mes de octubre para los actos centrales.
La convocatoria de ese debate queda aplazada ahora hasta el 9 de mayo con la confianza en que, para entonces, se pueda disponer de más información sobre qué actos concretos podrán celebrarse y con qué niveles de participación, en función de las restricciones que puedan seguir vigentes en el momento en el que se levante la declaración del estado de alarma. "Lo que no podíamos hacer era convocar una asamblea para tomar una decisión cuando todavía no sabemos a qué condiciones atenernos", apuntó la presidenta de la Federació, Toñi Martín-Zarco, a consulta de Alicante Plaza. En principio, a partir del proceso de consultas que la Federació ha mantenido con responsables de la Conselleria de Sanidad y del Ayuntamiento de Alicante, se prevé que se pueda disponer de alguna concreción sobre la previsible relajación de esas limitaciones durante la primera semana de mayo.
"Hasta ahora, estamos viendo que se están autorizando algunos actos como los conciertos en la Plaza de Toros, aunque tampoco se concreta con qué aforos, así que resulta incongruente que vayamos a una asamblea sin saber qué se va a poder hacer dentro de dos semanas ni cuál está siendo y va a ser la evolución del proceso de vacunación", incidió Martín-Zarco. "Ahora mismo estamos en una situación en la que, en los racós de las comisiones, solo se autoriza el acceso de seis personas para realizar cuestiones administrativas, cuando la realidad es que todavía tenemos actos multitudinarios por desarrollar que forman parte del calendario festero, como la gala de candidatas y la gala de elección de la Bellesa del Foc", abundó.
Esos dos actos son, en estos momentos, dos cuestiones prioritarias para la Federació, "porque son dos actos que requieren de un montaje complejo y que no se pueden organizar de hoy para mañana sin saber qué afluencia se permitiría", señaló. "Esperamos que el 9 de mayo tengamos alguna certeza adicional para poder valorar, pero que a nadie le quede la menor duda de que nosotros queremos celebrar las fiestas, lo que ocurre es que primero tenemos que saber si nos van a permitir celebrarlas y bajo qué condiciones", recalcó. "Estamos en las misma situación que las Fallas, que también están esperando disponer de más información en próximas reuniones con la Conselleria de Sanidad, como las que nosotros ya hemos tenido", concluyó.
Por lo pronto, en esa próxima asamblea -que se desarrollará de forma telemática- están llamados a participar el delegado y el presidente de cada una de las 89 comisiones, así como el presidente de cada barraca. Todos dispondrán de voto, en el caso de que se plantee la disyuntiva principal: si corresponde celebrar las fiestas, pese a que puedan estar sujetas a ciertas restricciones, o si conviene aplazarlas de forma definitiva hasta 2022.
Hasta el momento, según fuentes consultadas, existen partidarios de las dos alternativas tanto entre las comisiones (que dispondrán de dos votos) como en las barracas (con uno). Por lo pronto, algunas de las comisiones que plantan en categorías inferiores e intermedias se inclinarían, por lo menos, por sacar los monumentos a la calle para cerrar el ejercicio y evitar posibles costes de almacenamiento y mantenimiento de sus piezas, además de la posible fuga de comisionados. Por el contrario, algunas de las hogueras de mayor tamaño abogarían por aplazar las fiestas si no se garantiza cierta normalidad en su desarrollo que permita el desenlace de actos multitudinarios. Una posición que también compartirían buena parte de las barracas, cuya actividad sería prácticamente inviable de mantenerse las limitaciones que rigen en la actualidad para el sector de la hostelería.