ALICANTE. La ordenación urbanística que debe amparar el desarrollo del futuro Parque Central de Alicante sobre los terrenos liberados del ferrocarril queda abocada a superar un nuevo trámite administrativo -el enésimo- con su consiguiente demora. La propuesta de delimitación estructural de la llamada Operación Integrada número 2 (OI/2) tendrá que volver a someterse a exposición pública para la presentación de alegaciones, después de que se haya promovido una última reformulación que permite prolongar la extensión de esa futura zona verde hasta el espacio reservado a la construcción del edificio de la estación intermodal.
Se trata de un nuevo requisito planteado por la Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Transportes, al constatar que esos cambios estructurales (si se prefiere, genéricos, sobre las grandes cifras del plan, pero sin entrar en el detalle de cuál debe ser su ubicación concreta) afectan a la ordenación pormenorizada que sí se incluyó en el documento de ordenación que quedó aprobado por el pleno del Ayuntamiento a principios de 2015 y que se ha visto afectado por distintas modificaciones desde entonces.
De este modo, salvo imprevisto que fuerce otra adaptación en la hoja de ruta de la tramitación del plan, se prevé que la reformulación de la ordenación estructural quede expuesta al público a finales de este mes para que cualquier afectado o interesado pueda solicitar modificaciones por la vía de las alegaciones durante un plazo de 20 días. A ese impasse se añadirá el tiempo requerido para que esas objeciones puedan quedar analizadas y resueltas por parte de los técnicos de la Concejalía de Urbanismo, lo que podría retrasar el debate de la propuesta en pleno hasta el mes de marzo. Es decir, tres meses después de la fecha que había llegado a anticipar el equipo de gobierno, el bipartito compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs).
En todo caso, fuentes consultadas precisaron que el compromiso compartido por la Conselleria de Política Territorial y el Ayuntamiento de Alicante es que esa nueva ordenación estructural de la OI/2 que ampara la prolongación del Parque Central hasta la intermodal pueda quedar aprobada en la última reunión de la comisión territorial de Urbanismo de esta legislatura, que estaría programada para el mes de abril.
¿Cuáles son las modificaciones que incluye esa reformulación? La principal es la extensión de la superficie de zona verde hasta las proximidades de la estación intermodal, de modo que se configure un parque en continuidad sin que puedan intercalarse volúmenes para la promoción de viviendas hasta las inmediaciones de la avenida de Salamanca. Es decir, que se trataría de acercar el parque todo lo posible hasta el Centro. De este modo, esa gran zona verde debe rebasar los 156.000 metros cuadrados previstos de forma inicial, como informó este diario.
Pero, además, esa modificación también restringe la posibilidad de que el futuro edificio de la intermodal gane metros sobre la trasera de su emplazamiento que puedan quedar destinados a albergar locales comerciales hasta el punto de configurar una estación provista de un centro comercial interno inspirada en el modelo Vialia.
Y, en tercer lugar, el cambio propuesto también incorpora el requisito de la transversalidad en los recorridos entre las calles y barrios del entorno, de modo que se configure un parque permeable para los desplazamientos peatonales entre zonas históricamente separadas por las vías del ferrocarril. Es decir, justo como también se prevé en el estudio de alternativas para la ubicación de la intermodal diseñado por la UTE Peñín-Vicedo, compuesta por los gabinetes de arquitectura de Peñín Arquitectos S.L.P. y Emilio Vicedo Ortiz, con la colaboración del arquitecto Manuel Lillo y del ingeniero de Caminos Mauricio Úbeda Muller.
De hecho, los resultados de ese trabajo -en su última fase de elaboración- son los que han permitido dar encaje a la reformulación de la ordenación estructural de la OI/2 al confirmar que el conjunto de esas condiciones y modificaciones tienen cabida en el ámbito de los terrenos de Adif.
En cualquier caso, la reformulación de la OI/2 no es la única actuación relacionada con las infraestructuras ferroviarias de Alicante que puede deparar modificaciones en los próximos días. De hecho, se espera que pueda conocerse la solución planteada por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para la situación de las antiguas vías de Benalúa que conducían hasta la estación de Murcia (hoy reconvertida en sede de Casa Mediterráneo) en la reunión de trabajo concertada con representantes del Ayuntamiento de Alicante este próximo día 25 en Madrid.
Así lo avanzó la secretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo, en su reciente visita a la ciudad, en la que avanzó que el ministerio ya disponía de una alternativa con el propósito de retirar esas vías en desuso, al tiempo que garantizó que la electrificación del cercanías entre Alicante y Elche sería una medida provisional que permitiría acelerar la ejecución de las obras de la Variante de Torrellano con el compromiso de despejar, después, el trazado ferroviario actual por la línea de costa, pese a su electrificación. En esta línea, aseguró que el pliego de condiciones para la ejecución de la electrificación de ese tramo incluía expresamente la retirada de esas vías.