El presidente de CHM, Vicente Vilanova (centro), en una imagen de archivoALICANTE. La constructora alicantina CHM Obras e Infraestructuras, especializada en obra civil, afianza su negocio en la Comunitat con dos nuevos contratos, en esta ocasión con las diputaciones de Alicante y València. Desde que el nuevo presidente de la compañía, el técnico Vicente Vilanova, tomó posesión del cargo, la firma de la familia Martínez Berna se ha adjudicado un buen número de contratos para ejecutar o mantener carreteras, la especialidad del nuevo ejecutivo (con amplia trayectoria en el Ministerio de Fomento).
La última adjudicación se refiere al mantenimiento de las carreteras gestionadas por la Diputación de València en la comarca de Utiel-Requena, en el interior de la provincia. El servicio, que CHM prestará durante tres años (forma parte del plan de carreteras 2017-2020), reportará a la caja de la constructora alicantina 5,6 millones de euros, impuestos incluidos, según el anuncio de adjudicación publicado por la institución provincial valenciana, que preside el socialista Jorge Rodríguez, en el Portal de Contratación. La de CHM fue la oferta mejor valorada entre un total de 13, al ser la económicamente más ventajosa para la administración.
El segundo contrato, en la Diputación de Alicante, aún no está adjudicado, pero la oferta de CHM ha sido la mejor valorada en el informe técnico que valora las distintas propuestas recibidas. Se trata de ensanchar el puente sobre el río Amadorio en la carretera de Orxeta, uno de los más característicos de la zona de la Marina Baixa. La infraestructura cruza sobre el agua al paso de la carretera CV-770, titularidad de la Diputación, sobre el río que abastece al pantano del mismo nombre, en La Vila. CHM ofertó 435.000 euros, la propuesta más económica de entre las que no han sido descalificadas por temerarias. Así, el informe del director del área de Servicios e Infraestructuras propone a la empresa de los Martínez Berna como adjudicataria. En este caso, si finalmente resulta adjudicataria, la constructora dispone de tres meses para ejecutar los trabajos.
El último gran contrato de carreteras que se adjudicó CHM en la provincia fue la renovación de la avenida de Entenza, en Alcoy, el pasado febrero. Las obras, que ya se están ejecutando, costarán 1,46 millones de euros (financiados con fondos Edusi) al ayuntamiento que preside el socialista Toni Francés. Pero sin duda la gran adjudicación que ha logrado CHM este año, aunque en este caso en UTE con la gallega Copasa, es la construcción de un nuevo tramo de la autovía A-33 en la provincia de Albacete, por 36 millones de euros (con una rebaja de casi el 40% respecto al presupuesto).
A pesar de que con la llegada de Vilanova la constructora se ha vuelto a volcar en su core, la construcción y mantenimiento de carreteras, lo cierto es que CHM no ha renunciado a diversificar su negocio, como ha venido contando este diario. En este sentido, cabe recordar que hace apenas un mes se adjudicó otros dos contratos con el Consorcio de Aguas de la Marina Baixa, para ejecutar conducciones en el embalse de Guadalest y en L'Alfàs del Pi, por valor de 4 millones de euros, tal como contó este diario.
Como se recordará, el empresario Rafael Martínez Berna dimitió como presidente de CHM en diciembre de 2017, meses antes de sentarse en el banquillo de los acusados junto a su hermano Tomás Martínez Berna (que dejó el cargo de consejero delegado) por el juicio a la financiación irregular del PPCV, que ambos (como Enrique Ortiz) admitieron, tras pactar con la Fiscalía. Los dos se encuentran al frente de la nueva empresa del grupo, dedicada a la explotación de complejos hoteleros. A pesar de que la empresa está ahora bajo la dirección de Vilanova, los cinco hermanos siguen formando el consejo de administración del grupo Vallalba, propietario de la firma.
