Las vallas protectoras que rodean el perímetro del parque de La Torreta de Alicante. Foto: RAFA MOLINA ALICANTE. El Ayuntamiento de Alicante sigue los pasos adoptados con motivo de la paralización de las obras de remodelación de la Plaza de San Blas e inicia los trámites para rescindir el contrato de construcción del nuevo parque del barrio de La Torreta (antes PAU 2) en la calle Isla de Corfú, adjudicado a una UTE compuesta por Ecisa y Construcciones Urrutia (ambas, en realidad, filiales del grupo Urbas). Se trata de una decisión adoptada después de que la propia UTE haya renunciado a la ejecución del proyecto, según han informado fuentes municipales, a través de un comunicado. Dicha renuncia se habría registrado después después de que el retraso en el desarrollo de las obras haya forzado a la Concejalía de Urbanismo a acordar su paralización temporal, al constatar que se había producido el vencimiento de la prestación del servicio de seguridad y salud necesario para dar cobertura a sus obras.
De este modo, el alcalde de Alicante, Luis Barcala, y el concejal de Urbanismo, Adrián Santos Pérez, han mantenido este viernes una reunión informativa con los representantes vecinales del barrio, a quienes han garantizado la ejecución de la nueva zona verde "con la mayor celeridad posible", ya que existe disponibilidad económica para hacerlo, según las mismas fuentes.
En esta línea, el primer edil ha explicado que la paralización de las obras se produce como consecuencia del retraso en su ejecución por parte de la UTE adjudicataria "por cuestiones de liquidez", después de que los técnicos municipales descartasen la posible concesión de una prórroga en el plazo de ejecución.
Tanto el alcalde, como Santos Pérez, han explicado que se ha iniciado el procedimiento de liquidación del contrato para lo que se ha elevado una petición de resolución por parte del Consell Jurídic Consultiu (CJC). Una vez se reciba, el Ayuntamiento procederá a tomar posesión de las obras para reforzar la seguridad y evitar actos vandálicos, según abunda el comunicado.
Se deberá convocar un nuevo concurso para completar el proyecto tras la ejecución de un 38% de sus obras
También se garantiza el mantenimiento de las plantaciones de arbolado ya realizadas para lo que se dispone de riego automático en funcionamiento. Barcala y Santos han explicado además que se realizarán riegos periódicos por aspersión para evitar que se levante polvo y evitar molestias a los vecinos.
De forma paralela, se iniciará un nuevo procedimiento de licitación de las obras pendientes, con el objetivo de que se pueda reanudar su ejecución y alcanzar la finalización de las mismas lo antes posible. También se ha señalado que las obras se encuentran avanzadas, en lo concerniente a obras de fábrica, canalizaciones, instalaciones y plantaciones, a falta del rematar el ajardinamiento y colocación de juegos infantiles y mobiliario urbano.
El alcalde de Alicante, Luis Barcala, y el edil de Urbanismo, Adrián Santos Pérez, junto a la junta directiva de la asociación de vecinos del PAU 2- La Torreta.El alcalde ha resaltado que "la financiación de la obra está garantizada y en el momento se reciba la notificación de la resolución del Consell Jurídic Consultiu (CJC) adoptaremos todas las actuaciones señaladas para asegurar las obras e iniciaremos un nuevo procedimiento de licitación para retomar la actividad con la mayor celeridad posible".
Las obras arrancaron el 7 de febrero con una inversión prevista de 1.845.517,51 euros y un plazo de ejecución de doce meses que, en consecuencia, ya se ha superado. Dicho presupuesto se amplió en 385.000 euros después de que, en julio, se aprobase un modificado del proyecto original para introducir correcciones y mejoras relacionadas con el sistema de riego y la red de alumbrado, además de variaciones en la pasarela peatonal prevista para conectar dos zonas del parque situadas a diferente nivel.
A partir de entonces, la dirección facultativa detectó retrasos respecto a los plazos reflejados en el plan de obra, lo que motivó la remisión de varios escritos a la UTE adjudicataria en los que se conminaba a acelerar los trabajos y ajustarse a los plazos previstos. Este proceso ha terminado con la renuncia de las empresas adjudicatarias a la obra por falta de liquidez e imposibilidad de cumplir con los plazos, según han reseñado las mismas fuentes. Hasta el momento, la obra de la nueva zona verde, de 20.000 metros cuadrados, se habría ejecutado en torno al 38% por lo que se deberá volver a licitar un segundo contrato para completar su finalización.
