SANT JOAN D'ALACANT. De crisis sanitaria a crisis económica. Los de contagio por coronavirus no son los únicos síntomas que están sacudiendo al mundo y, de manera más particular y cercana, a España a causa de la pandemia. Los síntomas posenfermedad están ya sucediéndose en el país en forma de ERTE, cierre de empresas, aumento de paro o bajas en las personas afiliadas a la Seguridad Social. La provincia de Alicante ha registrado durante el mes de marzo una reducción de 43.987 afiliados, como ya informó Alicante Plaza.
Sin embargo, un dato destaca por encima del resto y es que Sant Joan d'Alacant se ha coronado como el municipio que más bajas ha registrado en la Seguridad Social durante este primer mes pandémico, perdiendo un total de 1.984 trabajadores, lo que supone un 22'5%, según datos de la Seguridad Social. Unos números que sitúan a la localidad con "el porcentaje más alto de toda la provincia, por encima de los núcleos industriales", tal y como ya anunció este medio.
Esta situación se produce porque "nosotros no tenemos sector primario, no tenemos industria", interpreta la incógnita el alcalde del municipio, Jaime Albero (PSOE). Y recuerda que se debe tener en cuenta el porcentaje significativo que representa "la economía sumergida en la provincia, donde todas aquellas personas que estaban recibiendo dinero a través de trabajos en los que no estaban dadas de alta en la Seguridad Social (personal de limpieza doméstica, una parte de hostelería...) ahora mismo se acaban de incorporar a ella para poder percibir las ayudas, porque se han quedado sin ingresos".
Si bien Sant Joan carece de industria, el municipio depende de dos patas fundamentales: el sector sociosanitario y educativo, por un lado, y el comercio y hostelería, por el otro. En el contexto del covid-19, esta división está teniendo suertes distintas, ya que el ámbito sociosanitario y educativo "no ha tenido ningún tipo de incidencia; de hecho, seguramente haya más trabajo del que había al principio", intuye el primer edil, quien apunta que "el empleo sanitario no contabiliza solamente en Sant Joan, sino en los puntos de origen de los trabajadores".
Pese a que este primer sector reúne en la localidad uno de los campus de la Universidad Miguel Hernández, el Hospital Universitario, el psiquiátrico, la residencia y centro ocupacional APSA, el Centro San Rafael y las residencias de mayores, el segundo pilar que sustenta a Sant Joan suma "alrededor de 600 establecimientos, aunque la hostelería y el comercio cesaron su actividad hace un mes", menciona. Y añade que "con casi toda la playa de San Juan cerrada -que es el principal sitio donde se sitúa este sector en el municipio- resulta bastante complicado cuantificar el impacto".
Ante la situación que está generando el covid-19, Sant Joan ya prepara medidas para hacer frente al impacto económico: "Lo primero que estamos haciendo es analizar las medidas que se están impulsando desde otras administraciones para complementarlas desde el Ayuntamiento y no lanzar ayudas con el mismo concepto", explica. Para que esto suceda, Albero ha mantenido una reunión telemática con la directora de Labora, Rocío Briones, con la intención de "analizar cuáles son los próximos movimientos de la Generalitat y, de esta manera, coordinarnos, porque no quiero anunciar medidas que luego vaya a impulsar la Conselleria", justifica.
Por el momento, desde el Ayuntamiento de Sant Joan se están estudiando soluciones relacionadas con los tributos municipales, como "devolver las tasas que han pagado por adelantado de ocupación de vía pública", ejemplifica el alcalde. Además, en la apuesta por las empresas locales, el consistorio se encuentra "cuantificando las iniciativas para llevar a cabo un plan de estímulo de la economía en todos los sectores, para realizar obras de urgencia", adelanta. "Las vamos a replantear haciendo contrataciones a empresas locales, siempre respetando los principios de publicidad, igualdad y los límites legales que rige la contratación pública".
Pese al cambio de paradigma social y laboral que se está viviendo, los gobiernos han continuado trabajando, aunque con ciertas limitaciones. Una de ellas se ha manifestado en los órganos colegiados, en concreto en las sesiones plenarias, porque "el programa con el que trabajamos en la administración electrónica no contaba con la posibilidad de realizar los plenos de manera telemática y ninguna de las plataformas online nos garantizaba los niveles de seguridad que se exigen en la administración pública", expone el primer edil.
Es por este motivo que las sesiones plenarias se han visto canceladas, aunque "a principios de la semana que viene intuyo que ya estará operativa la funcionalidad dentro de la aplicación, por lo que para finales de abril o, como mucho, principios de mayo, podamos celebrar el pleno", pronostica. E informa que las Comisiones sí las están realizando mediante otra aplicación.
En cuanto a la reincorporación laboral de forma presencial, Albero comunica que se encuentran "trabajando en un protocolo de vuelta a la normalidad en la administración, porque casi todos los expertos coinciden en que hemos pasado el ecuador del confinamiento y es necesario empezar a pensar en el regreso". Un retorno que vendrá marcado, pero para el que los ayuntamientos deberán tener "preparados los medios y protocolos de actuación. Será en verano cuando podamos volver a la actividad de manera gradual y escalonada, e ir apoyando a aquellos sectores que hayan tenido que cerrar y se hayan visto más afectados", muestra sus intenciones el alcalde.
El festival se celebrará del 23 al 29 de marzo de 2025.