ALICANTE. El equipo de Gobierno del PP en el Ayuntamiento de Alicante, compuesto por ocho concejales en una corporación de 29 ediles, ha conseguido, este jueves, que su propuesta de cambio presupuestario para llevar a cabo inversiones por un importe de 12 millones de euros quede aprobada de forma definitiva. El acuerdo ha prosperado con los votos a favor del PP y de los dos concejales no adscritos Fernando Sepulcre y Nerea Belmonte. Diez síes, frente a 13 abstenciones: las de los ediles de Guanyar, Ciudadanos y Compromís. Los 6 concejales socialistas han sido los únicos que han reproducido el voto en contra que emitieron en la comisión informativa de Hacienda, el pasado viernes, y se han mantenido en su rechazo. En el resultado de la votación habría sido determinante el acuerdo alcanzado entre los populares y Guanyar el pasado martes para no bloquear la ejecución de ese paquete de 22 obras municipales, entre las que se incluye la construcción de la plaza de la Ciudad de la Justicia, la reforma de la rotonda de la Isleta o los trabajos de recuperación del Castillo de San Fernando, entre otras.
El edil de Hacienda, el popular Carlos Castillo, ha sido el encargado de defender la propuesta y quien ha incidido en que cada grupo político tendría que retratarse al votar sobre la iniciativa. Así, ha recordado que la aprobación inicial contó con 15 votos a favor: los de PP, Guanyar y los dos ediles no adscritos. Y ha abundado en que los proyectos que se pretende poner en marcha son los que impulsó el anterior equipo de Gobierno que están listos para licitar. En este sentido, ha insistido en que el PP no se ha negado nunca a "llevar a cabo otras inversiones que no estén incluidas en esta propuesta", en alusión a su posible dotación presupuestaria en las cuentas del próximo ejercicio.
Castillo ha detallado que no se podría entender que se negase que se ejecutasen las 22 obras incluidas en la propuesta de inversiones con la constatación de que existe la posibilidad económica de que se desarrollen, al existir una partida de más de 5 millones para ejecutar obras y al existir también la posibilidad de concertar un crédito bancario, después de haber saldado la deuda que se arrastraba y de haber cancelado el plan de ajuste. Ese préstamo, según el regidor, se cerrará con unas condiciones muy ventajosas: un año de carencia a un tipo de euribor más 31 puntos.
La no adscrita, Nerea Belmonte, ha confirmado su voto a favor, como ya hizo a en el pleno del pasado 15 de octubre. Con todo, ha lamentado que queden fuera inversiones en otros barrios. El segundo edil no adscrito, Fernando Sepulcre, se ha pronunciado en términos parecidos y ha instado al resto de grupos a explicar por qué podrían llegar a bloquear esa propuesta.
El portavoz de Compromís, Natxo Bellido, por su parte, ha recordado que la propuesta que se plantea se basa en los proyectos que el PP se ha encontrado "hechos" y ha acusado al equipo de Gobierno de haber aportado sólo la crisis institucional que supuso el pleno de investidura de Luis Barcala como nuevo alcalde, gracias a la abstención de Ciudadanos y de Belmonte. Así, ha incidido en que el PP no ha tratado de pactar nada con Compromís, pero ha adelantado que su formación no iba a permitir que la ciudad pagase los platos rotos de la forma de comportarse del PP en funciones de gobierno.
Su homóloga de Cs, Yaneth Giraldo, también ha confirmado su posición de abstención, al no comulgar con la propuesta de contratación de un crédito para inversiones cuando podía aplazarse esa decisión hasta la elaboración del próximo presupuesto. Eso sí, ha recriminado a PSOE, Guanyar y Compromís que no hubiesen sido capaces de llevar adelante los proyectos que ahora se plantean y que hubiesen dejado al PP "el caramelito" de poder ejecutarlos y de cancelar el plan de ajuste.
El portavoz de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, ha justificado su respaldo a la propuesta en la coherencia de no bloquear inversiones planificadas desde las concejalías que desempeñó durante su etapa en el equipo de Gobierno y en la admisión de otro documento de compromisos políticos para incluir nuevas inversiones en el presupuesto de 2019. En esta línea, ha defendido que la prioridad de Guanyar es que se ejecuten los proyectos que necesita la ciudad. "Nos da igual pactar con ustedes", ha dicho, en referencia, al PP, "o con el sumsum corda".
La líder del PSOE, Eva Montesinos, ha señalado que el PP ha conseguido un acuerdo con Guanyar porque no son una competencia política, con una promesa que difícilmente van a cumplir y que, después, Guanyar deberá explicar antes sus votantes. En todo caso, ha insistido en que la responsabilidad de que la propuesta no quedase aprobada sería del PP, que es quien gobierna, y ha recordado la nefasta gestión de los populares en el mandato pasado, "que nos lleva a oponernos a que el PP vuelva a impulsar una operación de préstamo", o el rechazo a inversiones como la plaza de la Ciudad de la Justicia a la que el PP se opuso y que ahora defienden, por ejemplo. Así, ha instado al edil de Hacienda por qué ningún grupo político de la oposición "al margen de los tránsfugas van a apoyar la propuesta". "Nos hablan de diálogo pero no se han reunido con nosotros para negociar nada y tampoco sabemos nada de los presupuestos de 2019", ha incidido.
En los turnos de réplica se han cruzado acusaciones entre el PP y el resto de la oposición, y entre los propios grupos opositores, sobre falta de credibilidad, engaños, incumplimientos y el recurso a los votos de los no adscritos, a los que, como han señalado tanto Belmonte como Sepulcre, "se nos ha llamado no adscritos o tránsfugas en función de lo que resultaba conveniente a cada partido en cada momento". La portavoz del PSOE, por su parte, ha señalado que su grupo negoció los presupuestos en el pasado con Belmonte cuando todavía era una edil no adscrita expulsada de una formación de corte progresista y que todavía no había cambiado la voluntad de la ciudadanía expresada en las urnas al permitir la investidura de Barcala como nuevo alcalde.
El pleno ha comenzado con un encontronazo a cuenta de una petición de intervención cursada por la Confederación Nacional de Trabajadores (CNT) en relación a esa propuesta de modificación. El primer edil ha tenido que instar a la representante de ese colectivo a ceñirse al objeto del acuerdo sobre el que se había solicitado intervenir, lo que ha propiciado un intercambio de reproches por parte de varios de los asistentes a la sesión, en el salón de plenos. En varios momentos, han recriminado que el alcalde les impidiese intervenir al grito de "La Ley Mordaza de Barcala" o de "Sí se puede". El regidor, por su parte, ha respondido que "desgraciadamente no es así; se trata de cumplir el reglamento del pleno" en el que se determina que debe tener el uso de la palabra la persona que solicita intervenir y en alusión al punto sobre el que se quiere actuar. En todo caso, tras casi diez minutos de discusión, se ha permitido la intervención, en la que se ha hecho una defensa del derecho a la vivienda.