ALICANTE. Nació con polémica y se cierra con ella. Y sin consenso. El equipo de Gobierno del PP en el Ayuntamiento de Alicante dio finalmente por extinguida este viernes la comisión no permanente del pleno para la aplicación de la Ley de Memoria Histórica que debía concretar el listado de nombres con referencias franquistas a suprimir en el callejero de Alicante y, a su vez, tratar de acordar las denominaciones sustitutas. Pero en el desarrollo de la sesión (que duró tres horas), hubo de todo, menos acuerdo.
Por partes. El listado de calles a suprimir no fue motivo de discusión, puesto que ya se pactó en el pleno ordinario del pasado diciembre. Pero si hubo enfrentamiento respecto a las nuevas denominaciones que reemplazarán a los rótulos actuales. En el transcurso de la propia sesión, presidida por la edil de Cultura, Dolores Padilla, el PP dejó sin efecto la propuesta técnica elaborada por su departamento que se había facilitado a todos los miembros de la comisión y presentó otra distinta en la que se asumían todos los nombres aprobados en las Juntas de Distrito, a propuesta de los vecinos. Todos salvo uno: el de Camarón de la Isla que se había lanzado para denominar al barrio de José Antonio y que, finalmente, pasará a conocer como barrio de Miguel Hernández. Hasta ahora, en la propuesta inicial se admitían 5 de los 26 nombres planteados por las Juntas de Distrito (al que se añadió el de José Gutiérrez Peten en sustitición de Miquel Grau), no coincidentes con las propuesta de la propia comisión, como informó Alicante Plaza.
Eso sí, se añadía el compromiso de que las denominaciones que se habían reflejado inicialmente en la propuesta técnica de la concejalía, con las sugerencias negociadas durante las reuniones previas de la comisión, se aplicarían en otras calles de Alicante pendientes de rotular.
El PP justificó el cambio de su propuesta a última hora en la advertencia que se había formulado por parte de algunos representantes vecinales sobre la posibilidad de impugnar el acuerdo en los juzgados en el caso de que no se respetasen los rótulos reivindicados en las Juntas de Distrito. Los representantes de Ciudadanos (Cs) ya habían expresado este jueves que, a su juicio, sí debía respetarse ese criterio, de modo que mostraron su conformidad.
Sin embargo, la decisión generó el rechazo de los tres grupos progresistas que compartieron responsabilidades de gobierno hasta el pasado noviembre, PSOE, Guanyar y Compromís, quienes consideraron que el PP había roto el consenso alcanzado en torno a la última propuesta perfilada por el exconcejal socialista de Memoria Histórica, Fernando Marcos. En esa propuesta se planteaba una fórmula mixta por la que se incorporaban nombres acordados en las Juntas de Distrito y otros acordados en la comisión.
Representantes de la oposición consideraron que se había utilizado los acuerdos alcanzados en las Juntas de Distrito como argumento recurriendo a una perversión de la participación ciudadana, ya que, al parecer, en las Juntas de Distrito tampoco se consensuaron las denominaciones propuestas. Por su parte, el portavoz de Compromís, Natxo Bellido, fue especialmente contundente al señalar que "el PP vuelve a demostrar que no tiene credibilidad y que su palabra no vale nada, puesto que ha decidido romper el consenso alcanzado en la comisión y en la Junta de Portavoces celebrada el pasado miércoles en la que se nos dijo que se iba a mantener esa fórmula".
En la comisión no se llegó a plantear ninguna votación. Ni tan solo sobre el acuerdo de su disolución, sobre la que se había detallado que se iba a solicitar informes jurídicos que no se aportaron. PSOE, Guanyar y Compromís mostraron, en vano, su rechazo a esa decisión, tras insistir, como lo hizo el portavoz de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, en que además de las calles, en Alicante existían otros elementos a los que les resulta de aplicación la Ley de Memoria Histórica, como la Cruz de los Caídos, por ejemplo.
Sea como fuere, el equipo de Gobierno confirmó, a través de un comunicado, que las nuevas denominaciones quedarán aprobadas en una próxima Junta de Gobierno. A la reunión no acudió el colectivo Alicante Vivo -miembro de la comisión como representante de la parte social junto a la Comisión Cívica por la Recuperación de la Memoria- como señal de protesta, tras considerar que se habían mantenido denominaciones franquistas.