BENIDORM. Ahora sí, parece que el PAU 1-El Murtal empieza a tomar forma. Después de numerosos recursos de la empresa que han sido un impedimento para iniciar el proceso de urbanización, el Ayuntamiento de Benidorm ha conseguido inscribir en el Registro de la Propiedad el proyecto, con el que se abre un plazo de 36 meses para su ejecución total. El plan afecta a más de 900.000 metros cuadrados, que incluirían un máximo de 2.942 viviendas nuevas.
Su ubicación se encuentra en las inmediaciones de la avenida Juan Pablo II, donde los últimos años se ha celebrado una de las festividades más importantes para la ciudad, la Acampada de Peñas. Se trata de unos terrenos vírgenes que prometen la expansión de Benidorm por Poniente, la más tranquila hasta ahora, pero que suma cada vez más proyectos inmobiliarios, como Delfin Tower, o los apartamentos de TM.
Durante años bloqueada, los recursos presentados por el agente urbanizador se han ido resolviendo a falta del último que sigue abierto, de Prometosa contra el pago a los acreedores netos de algo más de 60.000 euros hecho por los propietarios del suelo para desbloquear el sector, como ya contara este diario.
Todos estos procedimientos quedaron plasmados en un informe de los técnicos municipales, en el que llegaron a decir que estaban intentando ganar tiempo para no asumir dicho proyecto: "denotaría una evidente incapacidad del urbanizador para asumir la ejecución del PAI". Con todo, la redacción de la reparcelación la llevó a cabo una empresa externa. Cabe señalar que la mercantil recusó a los técnicos municipales, por lo que no se podían hacer cargo del mismo.
Así, el proyecto de reparcelación forzosa está en marcha y su calendario para la ejecución, listo. Tal y como explicó la concejal de Urbanismo, Lourdes Caselles, a partir de la inscripción y en un plazo de dos años, el agente urbanizador deberá aportar 6 millones de euros para “la ejecución de las obras públicas extrasectoriales que decida el Ayuntamiento de acuerdo con el planeamiento”, así como costear el depósito de abastecimiento de agua.
En este punto, la edil ha recordado que en la oferta presentada en su día por Prometosa para convertirse en agente urbanizador, el desarrollo de este sector se traducía en 8,5 millones de euros para el Ayuntamiento. A la firma del convenio en 2006, el Ayuntamiento ya recibió 1,2 millones de euros. El montante restante, según el acuerdo, se iría materializando a partir de un momento clave: la inscripción del proyecto de reparcelación en el Registro de la Propiedad. De hecho, en un plazo máximo de 60 días de esa inscripción tiene que recibir otros 1,2 millones de euros.
Asimismo, también se le requiere el abono de la factura correspondiente a la inscripción en el Registro, que asciende a 122.127,23 euros. Siguiendo con el calendario fijado en el convenio, tras el abono de esos 1,2 millones de euros, el urbanizador deberá aportar el resto, hasta alcanzar los 6 millones de euros, en 24 meses; una cuantía que se traducirá en obra pública.
Por último, el Consistorio explicó que los 1,3 millones de euros que restarían hasta los 8,5 millones ofertados en su día por el urbanizador no se ingresarán en las arcas municipales, ya que inicialmente irán a compensar las cargas de urbanización que le corresponden pagar al Ayuntamiento por el suelo que tiene en el sector.