MUTXAMEL. Mutxamel ha logrado crear todo un entramado deportivo -y, por ende, de ocio- alrededor de un edificio de principios del siglo XX. No se trata de una construcción cualquiera, sino de lo que en su día fue un matadero. Construido en 1925 y restaurado en 1978, el Ayuntamiento decidió rehabilitar la edificación con un proyecto que iba de la mano de Diputación, en el que ambas instituciones invirtieron un total de 360.000 euros (el 50% cada una). De esta manera, se logró convertir el antiguo matadero en una sala polivalente cultural que hoy acoge exposiciones, pequeños conciertos y talleres que se suelen organizar desde la Concejalía de Juventud.
"Por dentro está insonorizado", comenta el edil responsable de Obras, José Antonio Bermejo (PP), lo que propicia que las diferentes asociaciones culturales del municipio puedan ensayar ahí, como es el caso de la banda de tambores o de la Societat Musical L'Aliança cuando su sede se encontraba en obras. Fue en octubre de 2018 cuando se inauguró la nueva vida que se dio al denominado sector 7-F, en un proyecto que integraba -además del edificio-, la construcción de un parking, una pista de fútbol anexa y una zona infantil de juegos.
Estas actuaciones se sumaban a los ya existentes skatepark y parque canino -este último de unos 3.500 metros cuadrados- que se sitúan en la misma zona y que cohesionan una oferta de ocio y tiempo libre a través del deporte y, aunque en menor medida, la cultura. Posteriormente a la rehabilitación del matadero y la construcción de la pista polideportiva de fútbol, el Ayuntamiento también ha construido una pista de baloncesto que se inauguró en diciembre de 2020.
Pero la zona dotacional deportiva del sector 7-F todavía planea más actuaciones para convertirse en un entramado completo. Las siguientes construcciones previstas incluyen una pista de pumptrack, zonas ajardinadas, de equipamiento y de calistenia -que se suma a la ya construida en el polideportivo- y acondicionamiento de las parcelas, actuaciones para las que el consistorio mutxamelero invertirá 387.000 euros.
Con estos trabajos que están pendientes de desarrollar, se pondría el punto final a la reconversión de una zona residencial y escolar de nuevo crecimiento, que se liga con la avenida de Valencia que se inauguró en el pasado verano y que agiliza la entrada y salida del municipio, ya que "puedes venir desde la CV-800 hasta la ronda de Sant Joan y San Vicente en una recta", explica Bermejo.
Además del deporte, en las actuaciones ejecutadas en el sector 7-F cobra especial importancia la parte medioambiental, con la instalación de luminarias led en todo el complejo a excepción del parque canino, que son solares. No es la primera reconversión que protagoniza Mutxamel, pues como informó este medio hace unos días, el Ayuntamiento ha convertido lo que fue una escombrera en un área medioambiental en el Monte Calvario, que fomenta la actividad -física y social- al aire libre.