SANTA POLA. Tras varios en una situación en precario y bajo la advertencia de la Dirección General de Salud Pública de que las instalaciones necesitan una remodelación (y que podrían ser clausuradas), el Ayuntamiento de Santa Pola busca una solución a los puestos que venden pescado en el puerto, las conocidas popularmente como 'les Casetes del Peix'. Se trata de una cuestión que viene de lejos, que ya lo intentó el anterior equipo de gobierno, y que el nuevo, integrado por concejales del PP, busca acelerar con el objetivo de dar seguridad jurídica a los explotadores de esos puestos. Así, el pasado martes, en el pleno municipal, se aprobó una declaración institucional, aprobada por todos los grupos políticos, que viene a marcar la línea de trabajo para alcanzar un triple objetivo: mantener los puestos en actual ubicación; obtener una concesión administrativa y poder rehabilitar las instalaciones.
Actualmente, ya existe una Memoria Valorada Puestos de la Lonja del Pescado Fresco, tramitada ante la Dirección General de la Salud Pública de Elche y que establece cómo debería realizarse la reforma. También considera vital el equipo de gobierno que los puestos se mantengan en la zona adyacente a la plaza Constitución, junto al puerto pesquero. "Se trata de un enclave muy reconocible por nuestros turistas y visitantes", indica la declaración institucional.
Y para poder llevar a cabo la reforma, el ayuntamiento santapolero propone a la Generalitat poder optar una nueva concesión de un mínimo de cinco años para la explotación de los locales de venta pescado, lo que permitiría la rehabilitación de los mismos y los dotaría todas las infraestructuras necesarias para el desarrollo de su actividad, defiende el consistorio.
En caso de que la Generalitat adujera problemas legales para que sea el ayuntamiento el nuevo concesionario -para asumir, a su vez, el coste de la reforma- Santa Pola está dispuesta a plantear un cambio en la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos de la Generalitat para que ese nuevo escenario sea factible.
En el mismo pleno municipal, el grupo municipal de Ciudadanos elevó una moción, que también fue aprobada, en la que se propone a la Generalitat que cumpla la Ley de Puertos y que invierta el 40% de lo recaudado en la mejora de las instalaciones. De esta manera, la formación naranja propone que la Generalitat cree una partida específica que refleje las inversiones para el mantenimiento de los puertos de la Comunitat con el 40% de los ingresado por tasas y tarifas, y que esa partida recoge un reparto equitativo entre todas las dársenas; establecer mecanismos de compensación por lo que no se ha invertido en años anteriores; que los presupuestos del Consell recohan partidas nominativas con la cantidad que corresponde a cada puerto, y sobre todo, establecer un Consejo de Navegación en cada puerto, en el que estén presentes los representantes de cada ayuntamientos, cofradía de pescadores, club náutico o personas que tengan interés o que puedan contribuir al buen funcionamiento del puerto.
Hay que recordar que esa fórmula, la del Consejo del Puerto, sí que está en funcionamiento en Dénia. Fue aprobada el pasado mandato en las Cortes Valencianas, con el respaldo de PSOE, Compromís y Ciudadanos. Ese consejo del puerto sí que establece que el 40% de los ingresos que se generen por la actividad portuaria reviertan en la misma dársena. En el caso de Dénia, en ese órgano, la Generalitat posee en 51% de la representación, además de la presidencia del órgano, y el ayuntamiento, el 9%.