El estado del edificio que albergó el antiguo cine Ideal de Alicante. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. La Plataforma Salvem l'Ideal, que reivindica la recuperación del edificio del antiguo cine de Alicante con el fin de que pueda tener un uso público cultural, persiste en reclamar explicaciones sobre el desestimiento sobre la compra del inmueble por parte de la Conselleria de Cultura al considerar que la tasación económica realizada por la Generalitat, a través de la Dirección General de Patrimonio de la Conselleria de Hacienda, incurriría en errores al no haber tenido en cuenta su valor cultural y que, además, se omitió la obligación de encomendar un segundo informe en el que se cuantificase ese aspecto.
En concreto, el colectivo alude al informe de no ejecución del proyecto de adquisición, que había quedado incorporado en los presupuestos autonómicos tras el desarrollo del proceso participativo para su elaboración con una dotación económica de 5,5 millones, para incidir en que en ese informe de valoración no se llegó a cuantificar el hecho de que se tratase de un edificio protegido por su importancia patrimonial.
Ese informe de no ejecución, elaborado por la Dirección General de Cultura el pasado 16 de diciembre (es decir, cerca de cinco meses después de que la Junta de Valoración de Inmuebles descartase la posibilidad de ejercer el derecho de retracto para comprar el antiguo cine), justifica el desestimiento de la adquisición en base a la diferencia de la suma pagada por una de las filiales del Grupo Baraka (Akra Leuke 2100) y el importe de la "tasación actualizada" que se encomendó a Hacienda.
De acuerdo con ese informe, el Grupo Baraka completó la compra del inmueble a la sociedad que agrupaba a la familia de propietarios originales (Herederos de Josefina Mingot) el 24 de enero de 2022 por una suma de 4.840.000 euros (impuestos incluidos), al margen del importe abonado desde que se concertó el contrato de arrendamiento con opción a compra, en octubre de 2019, como avanzó este diario. Además, esa resolución de Cultura señala que la tasación aportada por Hacienda cifraba el precio del inmueble en una horquilla situada entre los 1.802.052,23 y los 2.582.043,23 euros, después de que se reformularse la valoración inicial, que situaba ese valor entre los 1,5 y los 1,8 millones, como también había informado este diario.
El informe de Cultura también detalla que a esa horquilla reflejada en la tasación definitiva se habría llegado tras evaluar "dos hipótesis de aprovechamiento del edificio (una menor, de uso comercial en planta baja y resto para oficinas)", que daría como resultado el precio de 1,8 millones, "y otra mayor de uso comercial en planta baja y primera, y resto para oficinas", que elevaría su precio hasta los 2,5 millones. Y esa fue, a la postre la tasación en la que se basó la Junta de Valoración de Inmuebles para descartar la recompra del edificio al no poder justificarse la diferencia de precio entre esa valoración oficial y el precio pagado por Baraka.
Sin embargo, la Plataforma Salvem l'Ideal insiste en que la valoración en la que se fundamentó la decisión de la Junta de Valoración de Inmuebles era errónea al "ignorar" la protección patrimonial del antiguo cine y su valor cultural. Así, el colectivo señala que "la tasación en la cual se basa la no ejecución de la compra y que otorga al cine un valor comprendido entre 1,8 y 2,6 millones ignora el hecho de que el interior del Cine Ideal está protegido desde 2020". Y añade que "la tasación plantea la edificación de cuatro plantas de parking y cinco plantas de locales comerciales y oficinas en el solar del Ideal". Sin embargo, la Plataforma apunta que "la propia Dirección General de Cultura y Patrimonio ha manifestado que el Cine Ideal 'tiene una protección integral' al tener que conservarse la estructura de palcos y la cubierta, entre otros elementos de relevancia histórica" sin que esa circunstancia se hubiese incorporado a la tasación.
En este sentido, el colectivo arguye que dicha tasación que considera incompleta "se ha utilizado como excusa para no ejercer el derecho de retracto y adquirir el cine como era el mandato de los Presupuestos participativos". Es más, sostiene que "la Junta de Valoración de Bienes del Patrimonio Cultural Valenciano no realizó la valoración preceptiva que establece la disposición adicional cuarta de la Ley de Patrimonio de la Generalitat para los bienes de carácter cultural, sino que se limitó a aceptar la tasación errónea de la Dirección General de Sector Público y Patrimonio, que no tiene en cuenta el valor cultural y patrimonial del cine. Al saltarse el paso de valorar culturalmente un bien de carácter cultural como el Ideal, la Junta de Valoración de Bienes ha creado un precedente preocupante para el patrimonio cultural valenciano", insiste el colectivo.
Por ello, la Plataforma Salvem l'Ideal reclama "que los responsables de esa decisión den explicaciones públicamente" sobre ese procedimiento incompleto y avisa de que "no cejará en su empeño de que el cine sea adquirido para la ciudad de Alicante y sea declarado Bien de Interés Cultural". De hecho, como también ha informado este diario, el colectivo ha remitido un dosier en el que se recopila información adicional sobre el papel histórico del edificio con el fin de que la Conselleria de Cultura retome el expediente de evaluación y pueda llegar a corregir su primera resolución para que el edificio sea reconocido con la condición de Bien de Interés Cultural (BIC) y no solo como Bien de Relevancia Local (BRL), como queda catalogado ahora.
Entre tanto, el futuro del edificio de la avenida de la Constitución sigue pendiente de una doble opción a iniciativa del Grupo Baraka: su rehabilitación y transformación en hotel (para lo que se llegó a concertar un acuerdo de explotación con la cadena NH) y su recuperación y conversión en un centro cultural ligado a la figura de Carmen Thyssen, previo acuerdo de arrendamiento con la Diputación. Esa segunda alternativa sigue sujeta a la respuesta definitiva por parte de la institución provincial.
