ELCHE. La visita del conseller Marciano Gómez ha estado acompañada de varias novedades en cuanto a las infraestructuras sanitarias que el municipio lleva esperando desde hace años. El Hospital General de Elche, el centro de salud de Travalón, el consultorio de Torrellano o la reforma del ambulatorio de San Fermín. Sin embargo, la misma ha coincidido con comparecencias tanto de CCOO en el propio hospital, que ha exigido cumplir con las 35 horas, y con una rueda de prensa de Compromís, exigiendo la reversión del Vinalopó "y cobrar los más de 86,9 millones de deuda del hospital". Gómez ha rechazado tanto esta reversión como el acuerdo firmado con los sanitarios de las 35 horas, ofreciendo una propuesta alternativa.
En este sentido, Compromís ha avanzado que presentará en los ayuntamientos de Elche, Crevillent y a les Cortes Valencianes diferentes iniciativas para exponer "la realidad de la empresa Ribera Salud en el departamento sanitario del Vinalopó y reclamar que en los próximos meses el Consell comunique a la entidad la reversión a la gestión pública del hospital". Tras reunirse con colectivos de trabajadores y trabajadoras del Hospital, la coalición ha reclamado que el Consell exija a la empresa el pago de la deuda de 86,9 millones de euros que mantiene el centro ubicado en Elche con la administración pública entre los años 2010 y 2020.
“Ilicitanos y crevillentinos no podemos ser los únicos que tengamos externalizada la sanidad, como si fuéramos ciudadanos de segunda, ese experimento económico a expensas de nuestra salud siempre ha escondido intereses personales del en torno al Partido Popular y se mantiene en contra de una atención de calidad para las personas pacientes”, ha señalado la portavoz adjunta a Las Cortes, Aitana Mas.
Ha instado al conseller a pasarse por el hospital y hablar con pacientes y trabajadores. "Es importantísimo que el conseller de Sanidad y el señor Mazón sean transparentes en su gestión y la comunicación de esta. Ahora mismo hay un presupuesto debatiéndose en Las Cortes donde las liquidaciones de los conciertos sanitarios han desaparecido de las cuentas de ingresos. Intuimos que el señor Mazón está perdonando un parto de la deuda importantísima, una deuda de alrededor de 400 millones de euros a las empresas privadas que han gestionado los departamentos de Manises, Dénia, Torrevieja y Alzira. Le pedimos que antes de junio de 2024 prepare la reversión de este hospital, se acabe con una mercantilización de nuestra sanidad y deje de perdonar dinero a empresas que se hicieron en nuestra sanidad ya cuando gobernaban ellos", añade Mas.
Carles Esteve, portavoz de Sanidad a las Cortes, ha calificado de "engaño" la auditoría presentada por la Conselleria . "No solo no existe, sino que pensamos que la estrategia sanitaria de Carlos Mazón esconde un pacto con Ribera Salud como él mismo reconoció a Las Cortes, para condenar la deuda de Ribera Salud en el departamento. Esa deuda debería de reinvertirse en la calidad del departamento", ha manifestado Esteve.
Por su parte, Esther Díez y Marce Giménez, portavoces de los grupos de Compromís en Elche y Crevillent, han avanzado además que presentarán mociones reclamando "la reversión y equidad en el trato, una atención que responda a criterios sanitarios y no económicos". Díez ha recordado que las dos poblaciones no "pueden ser las únicas ciudades valencianas que no tengan una sanidad 100% pública y ha denunciado que parte de la población de Elche esté segregada del servicio íntegramente público que sí disfruta la otra parte de la población ilicitana". Desde Crevillent el grupo lamenta que "tengamos una rotación de médicos tan grande, con pacientes que han cambiado de médico de cabecera en el centro de salud tres veces en seis meses. El 70% de estos médicos no tienen el MIR o la especialidad de familia", señala entre otras cuestiones.
Ante la reversión, y preguntado este miércoles por la cuestión, Gómez ha respondido que la actual conselleria no va a funcionar "con criterios ideológicos", añadiendo que solo lo hacen con los de "eficiencia, eficacia y que beneficien al ciudadano". El responsable de Sanitat esgrime que han demostrado que no tienen preconcebida ningún tipo de concesión, y la prueba es la de mantener la reversión de Dénia y Torrevieja, pero asevera que el Hospital del Vinalopó "funciona bastante bien, es el número 1 en los acuerdos de gestión", e incide en que sin decisiones sectarias hará lo que beneficie a la ciudadanía. En consonancia, "como sigue funcionando tal y como está ahora, por supuesto que seguiremos porque los indicadores que tenemos son satisfactorios".
Por su parte, aprovechando la visita, la secretaria general de CCOO en la Federación de Sanidad de la comarca de Vinalopó-Vega Baja, Yolanda Ferrández, ha denunciado que "nada del pacto se ha cumplido" sobre las 35 horas. "El acuerdo estaba firmado el 8 de marzo en una mesa sectorial con sindicatos y la Conselleria, no con partidos políticos, y tiene plenas garantías, por lo que debería cumplirse", ha expuesto Ferrández, quien denunciaba que la pasada semana se les trasladó que el acuerdo no se iba a cumplir tal y como se rubricó en marzo "porque según él no había informa de la Intervención de Hacienda", y que se abría a negociar uno nuevo pero que este no se iba a cumplir.
La responsable sindical esgrime que "no es cierto que ya estén para cumplir esas 35 horas", y recuerda que el pacto suponía una reducción de tres días de jornada este año como primera medida del pacto. Entre las mejoras, la jornada se reduciría de aquí al 2025 en siete jornadas, con mejoras salariales. "Teníamos una batería como mejoras en Atención Primaria" y advierte que esos 3 días de este año se están devolviendo a quien se les concedieron.
Sobre esta cuestión, Gómez, que ha abordado todos estos asuntos este miércoles en la ciudad, incide en que ofrecen con "todas las garantías" una jornada "real" de 35 horas para el personal sanitario, rechazando el acuerdo del 8 de marzo con los sindicatos de la Mesa Sectorial —a excepción de CESM, que se abstuvo—, porque era "una reducción de once jornadas hasta 2025 y además sin consignación presupuestaria". La propuesta de la conselleria consiste en 35 horas semanales para el turno ordinario, que comprenderán desde las 8 de la mañana del lunes hasta el viernes a las 15 horas, de manera que se pueda conciliar la vida familiar y laboral y el descanso de 48 horas a la semana.
En cuanto a los profesionales que realizan el turno rodado, "dispondrán de los beneficios de una jornada de 35 horas al reducir de manera proporcional la jornada anual hasta que se quede en 1.512 horas al año". Una propuesta más realista para el conseller, ya que la que estaba pactada reducía 11 jornadas "pero manteniendo los horarios semanales actuales e incluyendo los sábados". "Era una reducción del número de jornadas al año, sin respetar la conciliación ni el descanso de 48 horas del personal", sentenciaba Gómez, que se ha arremangado este miércoles en su visita a Elche por todos los asuntos tratados, desde la perspectiva de las infraestructuras pendientes, como de las críticas o exigencias de sindicatos y oposición.