BENIDORM. Un nuevo palo en la rueda para el desarrollo del Plan Parcial 3/1 'Industrial' de Benidorm. La sospecha que tenían en el Ayuntamiento desde hace un tiempo se convierte en realidad. El Consistorio tendrá que hacer frente a una nueva obra para dar viabilidad al polígono que lleva más de 30 años pendiente. La concejal de Urbanismo, Lourdes Caselles, ha informado durante el pleno celebrado este lunes que se trata de una exigencia del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible para la construcción de un nuevo acceso sur que podría costar tres millones de euros a los benidormenses.
Tal y como ha ido informando este diario, la administración local ha estado en contacto en los últimos meses con el Ministerio sobre esta nueva rotonda que se prevé desde la zona de la avenida Beniardá. Ahora, cuentan con la confirmación de que esta será una condición para que se pueda dar luz verde al sector. Y no solo eso, si no que lo tendrá que sufragar el municipio.
De momento, el proyecto no está redactado, según aclaró a este diario la edil, sin embargo, sí que cuentan con una valoración de lo que podría costar esos accesos requeridos: alrededor de tres millones de euros. Una cifra que podría variar en función de lo que finalmente se estime en el documento final.
Es una historia que se le repite al Consistorio. En la actualidad, el Ayuntamiento está costeando la construcción del conocido como 'Vial Discotecas' y las rotondas para conectar la avenida Comunitat Valenciana hasta la N-332. Una posición, la de derivar el gasto al municipio, que desde el gobierno local han criticado en sus manifestaciones públicas. Hay que tener en cuenta que el Ayuntamiento ha tenido que pedir un préstamo para poder hacer frente a esta obra que asciende a 16.165.746,66 euros.
El desarrollo del polígono industrial permitirá la explotación de unas parcelas que llevan años a la espera de que se puedan edificar. De momento, el proyecto que está anunciado en esta zona es el primer centro comercial de Benidorm. Unas instalaciones que se iniciaron en junio de 2017 con el parking subterráneo. Sin embargo, no pasó de ahí. Siete años después, las casetas de obra están abandonadas y los montículos de tierra inamovibles.
No es el único problema que tiene el Plan Parcial para su desarrollo. Además de los accesos, también está pendiente de terminar la urbanización, que se paralizó hace años y no se ha llegado a retomar. A pesar de que a principios de años el alcalde de Benidorm, Toni Pérez, daba de plazo el mes de mayo para desbloquear esta situación, lo cierto es que sigue sin aprobarse el expediente que dé luz verde a estos últimos remates en la zona. Una cuestión que además, está pendiente de los juzgados después de que el agente urbanizador haya recurrido la resolución de la Junta de Gobierno Local que entre otros asuntos estimaba la revisión de precios y requería unos plazos para la ejecución de la obra.