ELCHE. Finaliza el procedimiento que ha llevado a la extinción de la conocida empresa Elig Manufacturas de Acero, con 50 años de vida, ubicada en el Polígono de Carrús, y que cerró en el pasado 2019, acogiéndose a un concurso de acreedores. A principios de este mes de febrero el boletín mercantil registraba la culminación del proceso concursal, declarando la compañía extinguida.
En este sentido, el pasado 16 de octubre el Juzgado de lo Mercantil número 3 de Alicante declaraba auto de conclusión del concurso por insuficiencia de la masa activa (ausencia de patrimonio) con resultado de extinción de la sociedad, el cual se hacía efectiva el pasado 6 de febrero. Así, el administrador concursal entró en noviembre de 2020 y cesaba el 31 de enero.
En el auto de final del concurso figuraban como acreedores, además de varios particulares, el Fogasa, la Agencia Tributaria, Suma, la Seguridad Social, Banco Santander o CCOO PV, entre otros.
En retrospectiva, la entonces veterana compañía de la industria auxiliar del calzado, fundada en 1972, presentaba voluntariamente a concurso de acreedores en noviembre de 2019. Lo que empezó a generar inquietud entre la plantilla, ya que podía suponer el despido de medio centenar de trabajadores, como acabó ocurriendo, no sin antes varias concentraciones y manifestaciones. Desde la puerta de la empresa hasta el propio domicilio de los propietarios, que a su vez proyectaban con su promotora el desarrollo del sector E-33 en Carrús para suelo industrial y comercial. También ese año vendieron sus terrenos en el sector E-18 en Los Palmerales, aún a la espera de desarrollo.
Por su parte, representantes de los trabajadores por parte de CCOO se reunieron con el Ayuntamiento para que medeiara, aunque en estos casos es una medida que no suele tener impacto. Poco después, en diciembre de 2019, empezaba la fase de liquidación de la compañía y de Gares, con el resultado que ahora se ha oficializado.