Palacio de Justicia de Elche, en una imagen de archivo. Foto: PEPE OLIVARESALICANTE. El goteo de concursos de acreedores 'exprés' de empresas y autónomos que no pueden seguir en funcionamiento como consecuencia de la pandemia no cesa, pese a la moratoria concursal del Gobierno que se ampliará finalmente hasta el próximo 31 de diciembre el plazo por el cual las empresas quedan exentas de la obligación de declararse en concurso aunque se den las condiciones para ello. Si bien los expertos apuntan a un cambio de tendencia hacia los concursos ordinarios de empresas con opciones de sobrevivir, lo cierto es que la primera semana de marzo ha traído consigo una avalancha de concursos 'exprés', ideados para cerrar directamente la empresa.
Según los sucesivos edictos publicados en el Boletín Oficial del Estado por los juzgados de lo Mercantil de la provincia, desde que comenzó el mes se han declarado una decena de concursos de esta tipología, en la que el juez declara abierto el procedimiento y lo cierra en el mismo acto, sin llegar a nombrar administrador concursal. De esta forma, las empresas que saben que no disponen de recursos para superar el concurso no incurren en nuevos gastos de administración y evitan que los créditos sigan aumentando. Así, se pasa directamente a la fase de liquidación y se extingue la sociedad.
De la decena de concursos 'exprés' tramitados en los primeros días de marzo, destacan los que ha dirigido el juzgado de lo Mercantil 3, con sede en Elche, que ha tramitado seis. La mayoría de las concursadas son pequeñas empresas del sector del calzado o auxiliares, que no han podido superar la caída de actividad en su sector durante el último año como consecuencia de la pandemia. A estas firmas se añade una mercantil del sector turístico. Los otros cuatro concursos 'exprés', que han recaído en el resto de juzgados de lo Mercantil de la provincia, se refieren a tres autónomos y una pequeña empresa de transporte de mercancías por carretera con sede en la capital alicantina.
Cambia la tendencia de los concursos: del exprés con liquidación al ordinario para sobrevivir
La solicitud de concursos 'exprés' por parte de empresas y autónomos ahogados por la pandemia comenzó a despuntar en septiembre de 2020, tras la entrada en vigor del nuevo texto refundido de la ley concursal. En apenas mes y medio, como contó este periódico en su momento, los jueces de lo Mercantil de la provincia tramitaron medio centenar de concursos con liquidación automática. Pese a la moratoria concursal, desde entonces han sido varias las empresas que han acudido a este mecanismo para cerrar, con diez ejemplos en solo unos días este mismo mes.
El letrado Sebastián Crespo, de la firma Devesa & Calvo Abogados, aclaraba el pasado septiembre, a preguntas de este diario, que normalmente el denominado 'concurso exprés' tiene cabida en casos en los que "además de la insolvencia nos encontramos ante la inactividad de la entidad, la inexistencia de trabajadores, la práctica carencia de activos que no permiten sufragar los gastos del concurso, y la existencia de más de dos acreedores, cuyos créditos no se pueden liquidar". En estos casos, se declara en el mismo auto de apertura la conclusión del procedimiento, "cuando se aprecie de manera evidente que el patrimonio del concursado no será presumiblemente suficiente para la satisfacción de los posibles gastos, y además no es previsible el ejercicio de acciones de reintegración o de responsabilidad de terceros ni la calificación del concurso como culpable".
En cuanto a la prórroga de la moratoria concursal, que no ha evitado que desde que comenzó el año 2021 se hayan declarado en Alicante un centenar de concursos (entre 'exprés' y ordinarios) según las publicaciones del BOE, son varias las voces que advierten de que se trata de un arma de doble filo, ya que está permitiendo sobrevivir a empresas insolventes, que se han denominado 'zombis', y que podrían arrastrar en su caída a clientes y proveedores una vez que decaiga la moratoria. Pese a todo, el Gobierno tiene previsto aprobar una nueva prórroga hasta el 31 de diciembre en el próximo Consejo de Ministros, antes de que la medida decaiga el próximo domingo.
