Eva Crisol y Eduardo García-Ontiveros en un desayuno con los mediosELCHE. A media tarde del viernes se conocía que el portavoz y líder de Ciudadanos en la ciudad, Eduardo García-Ontiveros, había sido suspendido de militancia por la Comisión de Régimen Disciplinario. Una sorprendente noticia de la que se enteró por la prensa y que después pudo comprobar en su correo electrónico. Una situación que vuelve a dinamitar a la formación a nivel local y que muestra que a pesar de los intentos aparentes por recuperar la estabilidad, es una tarea harto difícil. De nuevo, se trata de otra cuestión ligada a peleas internas por el poder.
Una cuestión que a nivel local viene de la designación de Irene Ripoll, número tres de la lista y actual funcionaria de empleo, por parte de García-Ontiveros, que ejecutó la decisión la segunda semana de agosto, a pesar de que ya la tenía tomada desde mucho antes. Precisamente tardó en aplicarla porque él y su entorno sabían, o al menos intuían, que de decidirse por Ripoll y no por Mari Paz Gallud, la preferida por los Crisol y Emilio Argüeso, muy probablemente habría consecuencias. Como se suele decir, la venganza se sirve en plato frío. Así que tras aguantar presiones para que nombrara a Gallud, decidió apostar por Ripoll y formar un grupo de trabajo municipal con gente de su confianza para trabajar a largo plazo. Todo con una aparente normalidad, incluso con la protocolaria rueda de prensa de inicio de curso. Hasta que las costuras se han vuelto a romper.
Con esta suspensión cautelar, García-Ontiveros tiene cinco días para alegar contra la suspensión y diez contra el expediente disciplinario que se le abrirá. No obstante, rehúsa por el momento hacer declaraciones a la prensa, aunque desde su entorno señalan que se encuentra "tranquilo" al entender que no ha hecho nada mal, ya que ha configurado un equipo de acuerdo a la meritocracia que defiende marca el partido. Sin embargo, hace varias semanas, tras el nombramiento de Ripoll, desde la secretaría de Acción Institucional que dirige Jesús Gimeno, se elaboró un informe en el que establecía que el portavoz no había seguido sus directrices al nombrarla.
Y ese es uno de los quids del asunto, ya que a pesar de las orientaciones de la responsabilidad, es potestad del portavoz del grupo municipal designar al funcionario de empleo del grupo, por lo que el motivo de la sanción o suspensión cautelar parece al menos interpretable. No obstante, esta jugada entra dentro de la dinámica de puñaladas por la espalda para hacerse con el control de Cs a nivel autonómico. Algunos señalan que se trata de una reacción a la noticia desvelada por eldiario.es por la supuesta colocación de Argüeso de un asesor que no acudía a su puesto en el Parlamento valenciano. Una reacción que ha tenido como daño colateral al portavoz de Elche, que desafió a parte de la cúpula con el nombramiento de la periodista; un eslabón 'débil' desde el momento en que Madrid apostó por él y no por Eva Crisol como candidato a la alcaldía para evitar más espectáculos externos. Pero ha seguido trayendo cola.
Asimismo, en el caso de que la suspensión de militancia pasase a ser definitiva, la teoría dice que García-Ontiveros tendría que entregar su acta de concejal al no pertenecer al partido. Y en ese caso, correría la lista para que entrar la número tres. Casualmente, Irene Ripoll, la actual funcionaria de empleo que él designó y uno de los motivos por los que la tormenta en Elche no arrecia. Una paradoja digna de las convulsiones internas vividas desde la dimisión de David Caballero y Juan Antonio Sempere. No obstante, en ese caso la número 1 sería Eva Crisol por los despachos, como se dice en el fútbol, que ha quedado en un segundo plano en el grupo municipal —al menos de momento— ya que el portavoz ha tomado las riendas en este inicio de curso.
En menos de un año Cs fulminó a un asesor unilateralmente, apercibió con otro expediente similar al de Ontiveros a Caballero, siendo denunciado internamente por supuestos pagos irregulares, se ha sopesado crear una gestora en la junta de distrito de algunos críticos y sancionar a uno de ellos, Daniel McEvoy, y ahora se ha suspendido de militancia a García-Ontiveros, portavoz municipal. Y en este caso, viniendo de un informe realizado por Acción Institucional de Gimeno, que se alineó con Caballero cuando fue denunciado por los supuestos pagos irregulares. Ahora está con a Argüeso. Juntos lograron nombrar a nuevos asesores para la Diputación de Alicante aprovechando la salida de vacaciones de Toni Cantó.
