ALICANTE. Alguno no solo había reservado quirófano, es que le estaba administrando ya la anestesia, pero la realidad es que Benja Martínez todavía no ha decidido si se va a operar.
No solo le resta someterse a nuevas pruebas (una vez la inflamación ha remitido) y, como también contó Alicante Plaza, todavía ha de tomar una decisión tras reunirse con los médicos, es que este medio puede adelantar que Benja ha solicitado una segunda opinión sobre su dolencia, concretamente al doctor Ramón Cugat, un extremo del que el club es totalmente consciente.
Benja se lesionó la tarde-noche del miércoles en el transcurso del primer tiempo del amistoso que enfrentó al Hércules con el Eldense en el estadio Pepico Amat de Elda.
Como consecuencia de un choque con el capitán local Ricky López en la disputa de un balón, el futbolista blanquiazul cayó golpeándose en su hombro izquierdo. De inmediato abandonó el terreno de juego y fue trasladado en ambulancia al Hospital Universitario Virgen de la Salud de Elda-Petrer en cuyo servicio de urgencias se le inmovilizó la articulación. Ya el jueves se le practicaron las primeras pruebas siendo el diagnóstico una dislocación de grado 3 en la articulación acromioclavicular del hombro, dolencia que puede obligarle a pasar por el quirófano, lo que influiría en un periodo de baja que no será inferior a un mes (aunque no se intervenga y se opte por el tratamiento conservador), algo que conlleva que como mínimo se perderá el inicio de la competición (en un curso en el que la primera fase consta de solo 18 jornadas).
Tras firmar una gris temporada 2019/20 dentro del contexto negro tizón en el que se desenvolvió el equipo en su conjunto, Benja no solo ha convencido durante la pretemporada al técnico, David Cubillo, es que incluso varios equipos que antes de la misma se habían interesado por hacerse con sus servicios han vuelto recientemente a la carga.