Cubiplaya, proveedor de Mercadona, instalará una piscifactoría en Pilar de la Horadada 

ALICANTE. La Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica autoriza la instalación de una nueva granja marina en las costas alicantinas. Da el visto bueno a que la mercantil murciana Servicios Atuneros del Mediterráneo a que lleve a cabo esta instalación en Pilar de la Horadada. De esta forma la Comunitat mantiene su predominio en la producción de dorada a nivel nacional. Más de la mitad salen de aguas valencianas.

La empresa que ha solicitado esta instalación pertenece a la mercantil Pescamur, con base en el municipio murciano de San Pedro del Pinatar, limítrofe con Pilar de la Horadada. Además de contar con otras piscifactorías, una de ellas en el municipio murciano, para la cría de dorada, lubina, corvina y atún, también confecciona redes para este tipo de instalaciones y para la pesca. Desde 2003 desarrolla su actividad en el sector de la acuicultura. Otra de las empresas con las que cuenta, con la marca Cubiplaya, es para la fabricación de hielo. Es proveedor de Mercadona.

La autorización que ha obtenido ahora, aunque se publicó ayer en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) la resolución es de abril, le permite la producción de 3.000 toneladas al año de dorada y lubina. Para esto se le ha otorgado una superficie de 45 hectáreas, en disposición rectangular donde instalar 25 jaulas para el cultivo de esta especie de peces. Tendrán un diámetro de 30 metros y estarán distribuidas en cinco filas por cinco columnas. Se ubicarán a 4,4 millas náuticas, poco más de 8 km, de la línea de costa de Pilar de la Horadada.

Tanto por el tamaño de las instalaciones como por la producción autorizada se enmarca en el tipo de granja marina estándar. Se trata del segundo punto de granja marina en la comarca de la Vega Baja, después de Guardamar del Segura. El tercer municipio costero de la comarca, Torrevieja no cuenta en sus aguas con ninguna de estas instalaciones. Aunque desde que se inicie la actividad hasta su venta se calcula un periodo de tiempo de un año, está garantizada la salida de toda la producción. Esto debe al déficit de lubina y dorada que hay en España, es decir, se consume más de lo que se es capaz de producir.

No obstante, el sector acuícola en la provincia de Alicante cuenta con una capacidad de producción de 19.000 toneladas anuales, y alcanza una facturación en primera venta de unos 50 millones de euros, datos del pasado año. Esta cifra incrementará levemente con la construcción prevista de la primera piscifactoría en tierra en el puerto de Alicante. Está impulsada por el grupo local Aquaculture y la previsión es de producir 500 toneladas destinadas a la exportación. Grupos ecologistas y vecinales han presentado alegaciones ante el Ayuntamiento de Alicante contra la licencia ambiental, el estudio de impacto y el proyecto de vertido de esta instalación proyectada en el muelle 11 del puerto.

La demanda ha motivado el incremento tanto de solicitudes para ampliar instalaciones como la creación de nuevas. Quien lidera el sector es el grupo hispanogriego Avramar, con el respaldo de fondos de inversión de Estados Unidos y Abu Dabi. El pasado año facturó 95,2 millones de euros –un 30% más que 2019- por su producción en las costas valencianas. Su principal zona de producción es Castellón pero ha redirigido su estrategia hacia las costas alicantinas. Ha obtenido la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) para incrementar a 3.000 toneladas anuales la producción de su piscifactoría de Calp. Ultima también la apertura de unas instalaciones con capacidad para criar 5.000 toneladas en la costa de El Campello. La mercantil sumará más de 11.000 toneladas de corvina, lubina y dorada al año en sus instalaciones de la costa alicantina.

El sector de la acuicultura en la Comunitat lo completa dos grupos más. Por un lado la murciana Culmarex, propiedad de la salmonera canadiense Cooke Aquaculture que cuenta con dos granjas en la costa alicantina. Una de ellas se encuentra en aguas de Santa Pola aunque con instalaciones terrestres en Guardamar. En 2020 facturó 14 millones de euros, y cuenta con una capacidad de 3.500 toneladas. La otra se encuentra en Altea, y con una producción de 1.250 toneladas facturó cuatro millones. La tercera instalación está en Puerto de Sagundo.

Por otro lado se encuentra la alicantina Culmar. Ésta tiene su sede en el mismo municipio donde lleva a cabo su actividad, Guardamar del Segura y es la única con capital alicantino. Cerró 2019 con una facturación de 9,5 millones de euros