ALICANTE. El desprendimiento de un fragmento de cornisa registrado el pasado jueves en la torre del reloj del edificio histórico del Ayuntamiento de Alicante no tendrá consecuencias en forma de reprobación del alcalde, Luis Barcala, como supuesto responsable del suceso por no haber promovido la rehabilitación del inmueble a pesar de ser conocedor de su estado de deterioro al menos desde el año 2020, cuando se emitió uno de los últimos informes sobre el estado de conservación de los BIC de la ciudad. Por lo pronto, el grupo municipal de Vox ha anticipado este miércoles, a través de un comunicado, que sus cuatro concejales no respaldarán la propuesta de reprobación política que PSOE y Esquerra Unida Podem -con la previsible adhesión de Compromís- pretendían presentar por el trámite de urgencia para su debate en el pleno de octubre, previsto inicialmente para este jueves, día 31.
Su voto en contra habría impedido que la iniciativa llegase a debatirse en dicha sesión, que finalmente, ha quedado pospuesta hasta el martes 5 de noviembre tras la cancelación de todos los actos institucionales organizados por el Ayuntamiento, en señal de duelo por la catástrofe de la Dana registrado en la provincia de Valencia. En cualquier caso, el rechazo anticipado por Vox se formalizará en esa próxima fecha, en el supuesto de que los tres grupos proponentes persistan en su planteamiento.
¿Conlleva esa posición que Vox excluya al primer edil de toda responsabilidad respecto a ese desprendimiento? No, ya que -ahora sí de forma explícita-, los representantes municipales del partido que lidera Santiago Abascal han exigido su dimisión, así como la de todos los concejales que pudiesen tener alguna competencia sobre la conservación del edificio consistorial.
En esta línea, la portavoz municipal de Vox, Carmen Robledillo, ha argumentado este miércoles -antes de que se consensuase el aplazamiento del pleno- que su formación rechazaba la reprobación del alcalde por dos motivos. "El primero de ellos es que nuestra petición de dimisión del alcalde y de todos los responsables de no haber actuado para eliminar el riesgo de desprendimiento que se determina en los informes de 2020 se mantiene firme y en vigor, con todas las consecuencias", ha apuntado.
Y, en segundo lugar, ha apuntado que "hasta hoy hemos sido el único grupo de la oposición que parece haber entendido la gravedad del asunto y el único que ha pedido dimisiones. Ahora viene la izquierda buscando una reprobación que no vale para nada y que no pide la dimisión de ningún responsable, buscando únicamente un debate político de bajo nivel en el pleno sobre un asunto que podía haber costado muchas vidas, incluido las de decenas de niños que estaban de excursión en nuestro Ayuntamiento", ha recalcado.
"El que avisa no es traidor y dijimos que no íbamos a permitir que nadie usara este asunto para obtener rédito político y tener un minuto de gloria en el pleno; y si los grupos de extrema izquierda necesitan de nuestro voto para ello, que no cuenten con nosotros. Hemos pedido investigación interna y dimisiones, caiga quien caiga, y ello ya queda a la conciencia de cada uno", ha recalcado.
Entre tanto, los trabajos de instalación de las mallas de protección anunciada como primera medida de prevención el mismo día del suceso ha continuado desarrollándose en la segunda torre del inmueble, este miércoles, con lo que se mantiene el cierre al tráfico de la Plaza del Ayuntamiento. Esa limitación continuará hasta que se den por finalizados el conjunto de los trabajos de emergencia consensuados entre el Ayuntamiento y los técnicos de la Conselleria de Cultura, ya que el edificio está reconocido como Bien de Interés Cultural (BIC).
Al margen de ello, el equipo de gobierno ya habría concluido el informe anunciado por el alcalde este lunes, en el que se debía compendiar todos los estudios y actuaciones previas desarrolladas en la última década respecto al estado de conservación del edificio. En principio, se había llegado a concertar una comparecencia de la edil de Infraestructuras, Cristina García, este miércoles, con el fin de precisar todas esas iniciativas. No obstante, la convocatoria ha quedado anulada en señal de duelo por las víctimas de la Dana que ha afectado a la provincia de Valencia.
Al tiempo, los departamentos de Urbanismo y Cultura seguirían trabajando en coordinación con la Conselleria de Cultura para modificar el proyecto de rehabilitación que se promovió durante el pasado mandato autonómico. De hecho, según fuentes municipales, se había concertado una reunión de trabajo sobre ese proyecto entre técnicos de las dos administraciones antes de que se precipitase el desprendimiento de la cornisa de la torre.