ALICANTE. El promotor ilicitano Ramón Salvador, que se ha declarado culpable en el juicio por amañar el PGOU de Alicante dentro del 'caso Brugal', sigue siendo el principal moroso con Hacienda de la provincia de Alicante, según la lista de grandes deudores que publica anualmente la Agencia Tributaria. Y no solo no reduce el importe de la reclamación del fisco, sino que al cierre del ejercicio 2019, que son los datos que se han dado a conocer este miércoles, dicho importe había aumentado.
Así, su principal empresa, Residencial Mira Llevant SL, adeudaba al cierre del pasado ejercicio nada menos que 41,88 millones de euros a la Agencia Tributaria, una cantidad prácticamente igual a la de hace un año (42 millones). Sin embargo, la deuda personal del propio empresario con Hacienda aumenta, y alcanza los 2,18 millones de euros, cuando hace un año era de 1,4 millones. Es decir, en total, Hacienda reclama a Salvador algo más de 44 millones de euros, 700.000 euros más que hace un año.
Muy lejos del 'récord' del promotor ilicitano, pero también con una importante deuda que Hacienda no conseguirá cobrar (porque la empresa ya no existe) se sitúa Sol Mar Alquiler de Vehículos, de Xàbia. La Agencia Tributaria sigue reclamando los mismos 9,25 millones de euros que hace un año. La deuda llegó a ser de más de 10 millones, pero se redujo hace tres años en la fase de liquidación de la mercantil, que había entrado en concurso en 2011. Se trata de la empresa cuyo negocio compró durante el concurso la familia de Vicente Sala, y que estaba administrada hasta su detención por su cuñado, Miguel López, a través de Novocar. Ninguna de las dos existe ya.
También con la misma deuda que hace un año figura otra vieja conocida del sector inmobiliario de la provincia, el Grupo Santa Ana, también extinto. En concreto, su empresa matriz, Consorcio de Promoción y Vivienda (Coprovi). Como en el caso anterior, la empresa fue a concurso de acreedores con liquidación, sin atender la deuda con Hacienda, que le reclama desde hace tres años los mismos 7,15 millones de euros.
Quien sí rebaja su deuda un año más es el expresidente del Hércules Valentín Botella. La empresa del constructor oriolano, Procumasa, adeudaba al cierre de 2019 un total de 1,91 millones de euros a la Agencia Tributaria, lo que significa que ha vuelto a rebajar el importe inicial, que al cierre de 2018 era de 1,99 millones, y el año anterior ascendía a 2,1 millones. En dos años, la deuda ha bajado en casi 200.000 euros. Y quienes rebajan de forma sustancial su deuda, tanto que ya ni aparecen en la lista, son los hermanos Rafael y José Vicente Gregory. Su empresa Alicantina de Renta y Gestión, extinguida por el juzgado de lo Mercantil en 2019 tras diez años en concurso, adeudaba 2,2 millones de euros al fisco hace un año, pero en 2019 no aparece en el listado (lo que significa que dicha deuda ha caído por debajo del millón de euros).
Otro que rebaja su deuda es Intersa Levante, también en liquidación, que pasa de 2,43 millones a 1,19 millones (más de un millón de reducción en un año), mientras que otros grandes deudores de la provincia se mantienen en la lista con el mismo importe reclamado que hace un año. Así, Hacienda exige el pago de 1,65 millones de euros a Gestrumar 2001, de Santa Pola y propiedad del exconsejero del Elche CF Manuel Rocamora Mateo; de 1,15 millones a Calzados Cindy; de 1,32 millones a Calzados Oriental; así como de 1,22 millones a Calzados Sama; y de algo más de 5 millones a Calzados Primar, de Rafal, también en liquidación. También figura la promotora Costa Denia con una reclamación de 1,3 millones.
El Hércules reduce su deuda con Hacienda pero continúa en la lista de grandes morosos