Oficinas de Iberdrola en la Corredora / APELCHE. Tan sólo unos días después de que la tienda de infusiones Tea Shop, en una de las calles que conectan la Corredora con la Plaza de las Flores, anunciara que cierra la persiana para trasladarse al Centro Comercial L'Aljub, la sucursal de Iberdrola ha hecho lo propio. No cerrará obviamente las oficinas, pero se va de la emblemática calle, hoy en el ojo del huracán por las persianas que se han bajado, para trasladarse a la calle La Torre, en la zona del Pla y las inmediaciones de la Gasolinera Mora, donde ha estado tradicionalmente.
Con el traslado de Iberdrola, que solía acoger a bastante gente por su situación céntrica, se marcha otro de los grandes nombres de la Corredora, después de todas las marcas de Inditex que han ido yéndose de la calle y sus aledaños —la última, Oysho—, para irse a la gran superficie, con sus competidores del sector y donde tienen locales mucho más amplios. Tras el cierre de las compañías del textil, el cierre más sonado fue el de La Magdalena, que a pesar de su buen funcionamiento, decidió centrar todo su esfuerzo en Torrellano por la falta de capacidad para atender convenientemente las dos tiendas.
En cualquier caso, tímidamente se han ido abriendo nuevos negocios en este viario principal, algunos de belleza, alguna compañía de seguros, tiendas de ropa o recientemente una tienda de comics alrededor. Sin embargo, siguen sin ser negocios que hagan de polo atractor para el resto, que es lo que precisamente conseguían las marcas de Inditex. Así pues, habrá que seguir esperando al diagnóstico municipal que se ha encargado sobre el comercio y sus tendencias futuras, para ver cómo conseguir un mayor dinamismo en una calle que está lejos de su histórica actividad y de la que viven otras calles del centro como Hospital, Almórida o recientemente Mare de Déu del Carme.
