Corredora / PEPE OLIVARESELCHE. Antes del periodo vacacional, y tras la transformación del proyecto de la Corredora en el Plan Centro —que en teoría empezará ahora—, el Ayuntamiento anunció que en septiembre se pondría en marcha un proyecto para analizar la realidad comercial del municipio, un diagnóstico a partir del cual trabajar seriamente sobre el estado del sector a nivel local y qué problemas y necesidades tiene. Algunos de los aspectos que se han puesto de relieve en los últimos meses con el traspaso o cierre de conocidos comercios céntricos. Son sólo algunos de los que pretende solventar el Plan de Dinamización del Comercio Urbano de Elche.
Aunque de desarrollar el estudio de la situación la oficina técnica del Plan Estratégico Elx 2030 y la Agencia de Fomento de la Innovación Comercial (Afic), adscrita a la concejalía de Promoción Económica, ya hay descritas unas líneas maestras que abordará. Para potenciar el comercio urbano y la economía ilicitana, no sólo en lo concerniente al centro, se realizarán una serie de acciones que van desde el fomento de nuevas oportunidades de negocio y empleo, aplicando criterios de sostenibilidad, digitalización o ecoinnovación —una palabra que empieza a sonar en otras actuaciones estratégicas como el Centro de Diseño—, hasta el desarrollo de modelos de gestión empresarial modernos y flexibles, pasando por el desarrollo del comercio electrónico y la captación de inversiones y empresas vinculadas a actividades comerciales.
También está en la lista de acciones previstas la simplificación de los trámites administrativos para la creación de empresas y nuevas aperturas, la modernización de establecimientos mediante interiorismo o escaparatismo, atracción de talento, actividades de dinamización en los espacios públicos de las zonas comerciales, la promoción de los servicios públicos que presta la propia Afic, o la implementación de un plan de comunicación para el comercio urbano, así como el impulso del asociacionismo empresarial o la gestión agrupada en centros comerciales abiertos. Una serie de medidas que desde la concejalía se llevarán a cabo debido al momento difícil por el que pasa el sector comercial minorista, al atravesar por un proceso de cambios profundos —cierre de tiendas de barrio a favor de grandes superficies, venta online…— sumados a las consecuencias de la crisis.
Una situación que se ha de atajar dada la importancia del sector para la economía ilicitana. De hecho, y según el Instituto Nacional de Estadística (INE), a fecha de 1 de enero de 2017, en Elche había un total de 16.541 empresas, de las que 6.615 estaban vinculadas al comercio, transporte y hostelería, lo que se traduce en aproximadamente el 40%. Respecto al mercado de trabajo, en el año 2016 (del total de 77.29I trabajadores afiliados a la Seguridad Social) el comercio minorista ilicitano empleaba a 11.638 personas, lo que representa un 15% total, cantidad superada sólo por la industria manufacturera, con 13.516 trabajadores. Así pues, tiene una vital importancia no sólo para la economía local, también para la cohesión territorial del municipio, por lo que este diagnóstico es necesario para que el sector se aclimate a las nuevas tendencias y poder hacer realidad ese modelo de comercio sostenible, ecoinnovador, creativo y digital que persigue Elx 2030 y que entronca con la Estrategia Dusi.
