Fachada de la iglesia de San Agustín, en Orihuela. Foto. APORIHUELA. El Pleno de Orihuela de ayer llevó varios puntos, momentos y movimientos entre los grupos del Consistorio interesantes. Momentos tensos, pero también de distensión e incluso algunos mensajes que sabían a despedida. Una de las mociones que dejó movimientos llamativos fue cuando se discutió la propuesta en común de Cambiemos Orihuela y el grupo socialista para que el futuro de la iglesia de San Agustín sea sometido a la participación de ciudadanía y colectivos oriolanos. Y es que, el grupo de Ciudadanos (Cs), parte del equipo de gobierno local, se levantó en bloque y se ausentó del Pleno en el momento en el que iba a debatirse esta cuestión y no volvieron. La moción se rechazó con los votos en contra del PP, pero no se sabe qué posición hubieran tomado desde la formación socia del gobierno en Orihuela.
En el debate, desde Cambiemos Orihuela y PSOE se dirigieron, en concreto, hacia Rafael Almagro en un intercambio de pareceres con muchos reproches y diferencias. Para Karlos Bernabé, portavoz de Cambiemos, el acuerdo tal y cual se plantea, es "injusto e ineficaz" y puso en duda la necesidad de obtener la titularidad pública de la iglesia de San Agustín, cuando " no somos capaces de proteger otros bienes que ya son públicos, como el Palacio Rubalcava, o el azud del río". Carolina Gracia, desde el grupo socialista, reclamó a Almagro que "ha tenido usted un año para llegar a un acuerdo, pero no ha levantado ningún teléfono, salvo el de la Iglesia". Y se planteó cuáles serían los intereses para sacar adelante la permuta. La edil no adscrita, Carmen Gutiérrez, a pesar de no ser proponente de la moción, aseguró que la apoyaba aunque, en su opinión "se queda a la mitad".
El edil Almagro mantuvo que la propuesta de la permuta se llevaría a cabo y puso como ejemplos de gestión de recuperación de patrimonio cultural algunas de los proyectos que, asegura, están en marcha, como "las intervenciones en las Norias, el Palacio de Rubalcava, Saladares o los antiguos juzgados". Para el edil de Patrimonio oriolano, "la Iglesia no sale beneficiada, sino perdiendo, porque le cuesta el acuerdo 4 millones de euros". Como justificación del acuerdo apuntó que "esto a Orihuela no le va a costar porque cuando lo tengamos en propiedad, el Consell estará encantado de restaurarlo".
Esta moción llega después de que en el Pleno de marzo, la edil Sabina Galindo decidiera retirar un punto del orden del día, para aprobar el pago en efectivo de 42.000 euros a la Iglesia como compensación por la permuta de patrimonio y terrenos entre el Ayuntamiento de Orihuela y el Obispado. Es punto se retiró, precisamente, porque Ciudadanos anunció su intención de votar en contra. Esta vez, la oposición oriolana, decidió traer la moción a Pleno, al considerar que "unilateralmente", el concejal de Patrimonio, Rafael Almagro llegara a un acuerdo con la institución eclesiástica titular de San Agustín "incluso a espaldas de su socio de gobierno, Cs, que también ha declarado su rechazo".
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No obstante, el Pleno tuvo momentos de distensión, que llegaron con el acuerdo del primer punto, para aprobar la modificación del reglamento municipal de participación ciudadana y, sobre todo, con la moción de Cambiemos para la promoción de la salud y la soberanía alimentaria en Orihuela. En concreto, la propuesta incluye crear un mercado de producción local, y otras medidas para promover una alimentación más sana, sostenible y de proximidad para los centros escolares. Fue aprobada por unanimidad y dejó momentos de complicidad entre los grupos.
En este sentido, entre bromas sobre los hábitos alimentarios de los ediles, la concejal del PP, Noelia Grao, que anunció su apoyo a la moción, además de plantear que desde el equipo de gobierno ya se estaban llevando a cabo acciones, aprovechó el momento para apuntar que "estoy pletórica, este es el mejor Pleno que he tenido" e hizo un pequeño repaso e su etapa en el gobierno, que está a punto de acabar porque no está en la lista para el próximo mandato en las filas del PP. Incluso hubo reparto de bolsas y delantales entre los ediles.
Otra moción presentada, fue la de Cambiemos Orihuela y Claro, que llevaron al Pleno la reapertura y gestión pública del Centro Deportivo Municipal en Orihuela Costa. Criticaban la gestión privada del centro deportivo y reclamaban una bajada de los precios y bonificaciones para empadronados y colectivos vulnerables. A pesar de la oposición del equipo de gobierno para sacar adelante la propuesta, curiosamente, Ciudadanos fue más beligerante en sus argumentaciones que el propio Partido Popular. Desde el PP admitieron los problemas en la gestión que "estamos tratando de solucionar" y, aseguraron, que aunque no apoyan la propuesta, sí que comparten la idea de mejorar el servicio que, "desde el principio se veía que iba a ser una gestión con dificultad". El edil Víctor Valverde, se comprometió a mejorar la calidad del servicio y las tasas para equipararlas a las de otros municipios "y que no haya agravio comparativo de tasas".
