ELCHE. Este viernes la oposición ilicitana en bloque (PP, Cs, Vox y Eduardo García-Ontiveros) comparecía ante los medios para anunciar que van a promover una declaración institucional en el próximo pleno, elaborada por ReCoVa (la Coordinadora de Familiares y Usuarios de Residencias de la Comunidad Valenciana) para que se sumaran los los partidos de la corporación. La misma pide una comisión de investigación a Les Corts y que la Generalitat ejecute la resolución del contrato con la concesionaria, que caduca el próximo año. Hasta ahora se ha sumado la oposición, mientras que el bipartito, PSOE y Compromís, no han respondido. Una patata caliente para el equipo de gobierno ya que la presión es cada vez más intensa entre familiares y entidades tras los fallecidos durante la pandemia o la propia gestión desde antes de la misma.
Familiares de los residentes en el geriátrico piden una vez más actuaciones a la Generalitat para que investigue "las muertes acontecidas en esta residencia desde agosto de 2019, mes en el que se inició la concesión a la actual empresa (La Saleta Care, por 11,8 millones de euros)", refleja esta propuestas de declaración, que en segunda instancia pide al Consell que inicie el procedimiento de rescisión del contrato, al tiempo que "ejecute aquello que le corresponde dado que se trata de una residencia pública". Esto último en referencia por ejemplo a la reposición de las camas articuladas que están en mal estado y que según la asociación están en mal estado, "y cuya resolución se pidió hace un año a la Dirección Territorial de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas".
Más de veinte fallecidos
Según ReCoVa, en las primeras olas de la pandemia fallecieron veinte residentes de forma directa, a los que habría que sumar al menos los seis del pasado mes de enero de este año. Aunque según la asociación, han fallecido también otros por secuelas en los peores momentos de la pandemia, algo que ha pasado en otras residencias, indican, aunque no se hayan atribuido al coronavirus si ya eran negativo. En aquellos días, la conselleria de Sanidad aportó varias enfermeras y médicos, pero fueron insuficientes, ya que como denunciaban los familiares entonces, algunas de las personas mayores llegaban a los hospitales en estados de salud graves. Son algunas de las situaciones que han vivido los familiares, un calvario al intentar tocar puertas ante unas deficiencias que en fases de la covid más 'tranquilas', como verano, seguían quejándose porque había deficiencias con el aire acondicionado.