ELCHE. Como ya se había venido contando, uno de los principales huesos urbanísticos de la ciudad en los últimos años, desde hace tres legislaturas contando la actual, Nuevos Riegos El Progreso, ya está envías de solución. El último paso conocido era la redacción del proyecto básico en el pasado mes de junio, que incluía el diseño y las cantidades previstas del coste: 1,9 millones de euros. Ahora, tras el paso por la Junta Gestora del Palmeral, celebrada este lunes, el mismo se envía ya a Contratación para licitar las obras, pues también cuenta con el beneplácido autonómico. La compañía adjudicataria se encargará de tanto del desmontaje de la fachada y las excavaciones arqueológicas, como de la construcción del edificio de oficinas municipal. La primera fase podría empezar a finales de marzo.
Se trata de un solar de 166 metros en el que se levantará un inmueble de sótano con planta baja más cuatro alturas y que tendrá retranqueada la fachada con valor patrimonial por sus sillares y haber formado parte de la sala de venta de agua. En total, 700 metros cuadrados, con unos 125 por planta. Originalmente se había planteado estirar de la edificabilidad máxima, pasando de 5 plantas (como se quedará), a 6. No se exprime la superficie edificable que permitía el PGOU de 1.207 metros cuadrados, ya que hubiera aumentado los costes de la obra, teniendo en cuenta que ahora el Consistorio se va a apretar el cinturón con el plan de ajuste. Se destinará a oficinas aún sin decidir a qué departamentos, aunque depende de otras iniciativas municipales en marcha. En cualquier caso, era un objetivo buscado para ahorrar costes de alquileres.
De esta forma, el edificio quedará alineado a la altura del resto de la calle Almórida y Plaza de la Constitución, ya que la conselleria de Cultura ha cambiado de posición: en la anterior legislatura no permitía el retranqueo de la fachada. La misma tiene ahora protección ambiental parcial, por lo que se desmontará para después sanear las partes más deterioradas y volver a edificar incluyendo las piezas originales de mayor valor, como los sillares y arco superior.

- Boceto con las partes que se conservan en amarillo - AP
La misma empresa se encargará de catas, desmontar fachada y construir
Además, se introduce un alero con cubierta de dos aguas, como tenía la antigua sala de venta de agua, y acristalamiento del edificio interior. En todo caso, en el pliego se establece que la compañía que se encargue de la actuación tenga experiencia tanto en el ámbito de patrimonio cultural como en el de la construcción. El procedimiento para la ejecución del proyecto constará de dos fases: la firma tendrá un plazo de un mes para presentar el proyecto de demolición, y dos para entregar el de construcción.
Una vez se inicien las obras, el plazo de construcción es de alrededor de poco más de un año. No obstante, antes de poder acometer este paso, la compañía adjudicataria tendrá que realizar catas en el interior del inmueble. Hay que recordar que fue precisamente este hecho, el empezar la demolición sin haber realizado catas, el que desencadenó una sentencia del TSJCV, previa advertencia de la conselleria de Cultura, de que se habían saltado los procedimientos preceptivos. Precisamente por estar en Núcleo Histórico Tradicional (NHT) y ahora en Área de Vigilancia Arqueológica (AVA), con zona de restos arqueológicos habituales en cotas muy superficiales.
Con todo, el concejal de Urbanismo, Francisco Soler, señala que "a finales del primer trimestre de 2026, en marzo, o ya comienzos del segundo esperamos que dé inicio la primera parte del proyecto, la más compleja, que es la demolición y desmontaje de la fachada para después llevar a cabo las obras".

- Interior de las futuras oficinas - AP
Una inversión de 3 millones de euros
Así, aunque el proyecto en concreto rondaría los 2 millones de euros a la espera del coste de adjudicación, no hay que olvidar que el Ayuntamiento pagó en total 920.000 euros por los derechos edificatorios. El pasado mes de diciembre, finalizando el año, el equipo de gobierno formalizó la anunciada compraventa del inmueble de Nuevos Riegos El Progreso. Una compra por 777.146,7 euros (642.270 euros, más IVA), más una indemnización de 141.668 euros como acuerdo transaccional de responsabilidad, ya que la propiedad había demandado al Consistorio. A este respecto, la propiedad exigía al Ayuntamiento un total de 103.969,29 euros en concepto de reparación de los gastos de toda la gestión del proyecto inmobiliario, señalando que esto eran en todo caso gastos provisionales, pudiendo ampliarlos, y un valor de lucro cesante de 306.672,87 euros.