ELCHE. El gobierno de Pablo Ruz no escatima en gastos y desde que Partido Popular y Vox entraron al Ayuntamiento, su premisa fue clara: darle una sacudida a la gestión municipal para agilizar proyectos y que estos no solo se materialicen, sino que sean tangibles; que la gente los vea y perciba. A diferencia de la gestión de PSOE y Compromís de las dos anteriores legislaturas, el actual bipartito, camino del ecuador del mandato, ha encontrado las fórmulas para exprimir al máximo el rendimiento de la administración local. Sin embargo, ello también ha conllevado una contraparte importante en lo económico.
Como un boomerang, esa gestión para impulsar inversiones, embellecer el espacio público a través de servicios extra, o inversiones de gran envergadura en partidas como Fiestas, han acabado por generar el ya conocido déficit de 8,5 millones de euros. Los plazos son también conocidos: tiene que ir al pleno de mayo el plan de ajuste para tapar ese desfase negativo entre ingresos y gastos. Ahora bien, ello implica que una vez sacado adelante en la sesión plenaria, el Tribunal de Cuentas tenga que validar el Plan Económico Financiero (PEF), que además tendrá vigencia durante 2026.
Los contratiempos para el préstamo y sus inversiones
Una vez aprobado este, se tendrá que pedir a la Generalitat Valenciana permiso para que autorice la solicitud del anunciado préstamo para nuevas inversiones, dada su situación de inestabilidad presupuestaria (el déficit). De autorizarse todo, el Ayuntamiento tendría que licitar el crédito para que las entidades bancarias pujen por él. Teniendo en cuenta que el PEF se aprobará a nivel municipal a finales de mayo, el reloj corre y las nuevas inversiones a préstamo del Ayuntamiento necesariamente se retrasarán por todo el trámite que conllevan de concurrencia pública hasta que puedan empezar las obras.
Baja de partidas presupuestarias
Ahora bien, de aquí salen varias derivadas. La primera, es que del previsto crédito de 30,5 millones de euros que iban a pedir, ya apuntaba el edil de Hacienda Francisco Soler hace meses que sería menor. Y ello porque como ya hicieron el año pasado, han eliminado partidas presupuestarias que saben que este año no se van a utilizar, bien porque se descartan, o bien porque no harían falta las anualidades presupuestadas —a priori— este año, como es el caso de 1,2 millones de euros del Mercado Central.
Una táctica que ya se anticipaba para este curso porque la implementaron el año pasado: del teórico crédito de 20 millones de euros que se iba a pedir, acabó siendo de 14,3 porque dieron de baja partidas. Ahora, lo mismo con el próximo. También cabe la variable de que eran conscientes de que o no se iba a llegar a todo, o que como iban a entrar en déficit, habría que recortar el gasto sí o sí. Aunque negaran a preguntas de los medios cuando se habló del PEF, que se fueran a detraer partidas presupuestarias, como ahora hacen.
No hay amortización anticipada: sí bajas de partidas a préstamo
La otra derivada es que conscientes del revés de los plazos a esas inversores, que va también contra la imagen que exhiben de agilización y gestión, lo que el Ejecutivo dio a conocer el viernes es una supuesta amortización anticipada de deuda, porque las reglas fiscales obligan a priorizar este movimiento: destinar los ahorros a pagar deuda a las entidades bancarias. Sin embargo, aunque el vicealcalde y edil de Hacienda habló explícitamente de amortizar deuda, y así lo vendió como tal el Ayuntamiento en el comunicado, la situación apunta a que no se ha amortizado.

- Edil de Hacienda, Francisco Soler - -
- AP
Las partidas que se dan de baja consignadas a préstamo
Lo que se ha hecho es cambiar la fórmula de financiación de proyectos que estaban previstos con préstamos, para que la consignación sea con remanente y se pueda dar salida ya a determinadas cuestiones que apremian. Precisamente porque ese nuevo crédito tardará en llegar, si las administraciones superiores se lo autorizan. Por tanto, en la práctica se dan de baja 8,3 millones de euros que estaban previstos con un préstamo que aún no se ha pedido. De ahí que en parte dijera que "no tiene sentido amortizar un préstamo y luego pedir otro". Pero en la práctica, en tanto que no se ha pedido ni obtenido el nuevo crédito, no se podría estar adelantando deuda. Entre las partidas eliminadas para este año y que se aplazarán o se costearán con remanente: 2 millones para instalaciones educativas, 1,7 para el nuevo pabellón, 200.000 euros de Clarisas, 300.000 euros de leasing de Policía Local (que se adeuda al proveedor, como avanzó Información), 700.000 a rehabilitación de viviendas, 640.000 para el Huerto de la Virgen o 500.000 para aparcamientos, o más de 900.000 euros de José García Ferrández.
Un remanente que a priori no se puede utilizar para inversión o gasto
Ahora, con ese cambio, estas partidas se financiarían con este excedente de tesorería de 2024, y que a su vez aseguraría parte de las inversiones sin tener que esperar la llegada de un nuevo crédito. Esa es la 'amortización' de deuda que se ha hecho, una suerte de trampa al solitario. Y un matiz importante el condicional de que con el remanente se aseguraría las inversiones, porque sobre el papel, las reglas fiscales no permiten utilizar el remanente ahora para inversiones o gasto corriente. Intervención advierte que utilizar el remanente para financiar modificaciones de crédito no es un recurso contable y podría afectar negativamente a la capacidad de financiación. Se han destinado 10 millones de euros a modificar partidas de las cuentas con estas tres modificaciones. Pero ha habido más, sin ir más lejos, el jueves la Junta de Gobierno aprobó otra modificación presupuestaria por incorporación de crédito con remanente de años anteriores (la 12), de 3 millones de euros que no tiene que pasar por pleno. Financiación afectada de con gastos destacados como 890.000 euros de 2023 para la demolición de bloques de San Antón.
¿Hay expediente de amortización de deuda?
Asimismo, según fuentes municipales, no consta que se haya presentado el expediente preceptivo para amortizar deuda con los bancos. Con ese 'cambiazo' se salvarían las inversiones, a expensas de ver qué dice el Estado sobre el uso del remanente. De hecho, Soler el viernes afirmó que se estaba utilizando el remanente como permiten las reglas fiscales: pero dijo tanto que "solo se puede utilizar para amortizar deuda", en referencia a los 11 millones de euros que quedan de remanente, como que se permite utilizar en "determinados proyectos".
Dos hechos que se contradicen, y sin que hayan clarificado cuál sería entonces el criterio que sí permite el uso de los ahorros para un aspecto y no para otro. Por lo pronto, además de consignar inversiones con este monto, también se han aumentado más de 500.000 euros de gastos de organización en Fiestas, estando en mayo, con una dotación inicial para este ámbito de más de 600.000 euros.
Por otra parte, el sustituir la financiación de préstamo a remanente no elimina inversiones, las mantiene. Así que por esa vía no se estaría tapando el déficit de 8,5 millones de euros, dado que las partidas presupuestarias que sí se han eliminado y de las que se dio cuenta el viernes ascienden a 4,1 millones de euros. A expensas de conocer el PEF, es menos de la mitad de ese déficit que hay que equilibrar. Y como guinda, el utilizar remanente implica generar inestabilidad, por lo que si se sigue utilizando, en la liquidación de 2026 podría volver a repetirse este capítulo de aplazar inversiones, planes de ajuste, etc. Otro boomerang, o según el refranero español, la pescadilla que se muerde la cola.
Agotamiento de la partida de refuerzos de personal
Mientras tanto, y paralelamente, se ha agotado, en mayo, la partida prevista de refuerzos de personal —el Capítulo 1 de la plantilla municipal superaba los 100 millones de euros, más de un tercio del presupuesto municipal—. El PSOE ponía de relieve la semana pasada también que varios departamentos estarían colapsados de trabajo porque no se han renovado los contratos temporales que se hicieron —de obra y servicio— y que se encargaban de tareas estructurales en el Ayuntamiento.
Sin conductor del bibliobús
Ello hace que sean diversos los departamentos con trabajo acumulado y que van con retraso, desde una cantidad ingente de reclamaciones por nuevas tasas de basura que no se han bonificado y están sin resolver, a sanciones de la Policía Local sin tramitar, pasando por deudas con proveedores o que ahora no haya conductor del bibliobús, con especial peso en las pedanías. Están aprobadas las bases de su oposición desde hace un año, pero el mismo se jubiló y no se ha hecho una contratación que cubriera el tiempo hasta consolidar la plaza.
Otro ejemplo es que la estabilización ha supuesto mucho desembolso en horas extra para gestionarla, y hay que pagar una productividad —que se ha rebajado— que aún se adeuda, así como ayudas médicas a funcionariado, cuestiones para las que tampoco hay fondos.
En este sentido, los sindicatos pidieron hace dos meses conocer la situación específicamente ante estos problemas que también han detectado, ya que según fuentes sindicales, están recibiendo quejas desde que finalizó el proceso de estabilización. Aún siguen sin respuesta. Como apuntaban los socialistas, los contratos Programa autonómicos que se han hecho, con más de 100 personas en Acción Social, son todos temporales, ninguno con cargo a plaza, a pesar de que es una labora 'estructural'. Eso sí, desligan el Plan de Optimización de Recursos Humanos de esta situación, ya que era un compromiso del inicio de legislatura.
"Freno" a los concejales
Como curiosidad, ni Soler el viernes, ni Juan de Dios Navarro el jueves, contestaron a las afirmaciones de la situación de colapso en los departamentos o que se haya agotado la partida de refuerzos de personal en mayo. Práctica que hasta ahora sí hacían para responder a las denuncias del grupo socialista. Soler, de hecho, aunque con aparente normalidad, no negaba que haya problemas en las áreas, pero sí negó "problemas de especial importancia". Sin responder a la situación del bibliobús o a que haya habido un exceso de gasto de horas extra y de refuerzos, aunque sí reconoce que hay que "frenar" a los concejales porque todos piden más recursos para sus actividades.
Así pues, aunque este viernes, como días atrás, la sensación al menos de puertas hacia afuera es de normalidad, cada vez más reacciones y otras versiones de los mentideros locales desde la administración, cuando no datos, apuntan a otra visión de un gasto excesivo en diferentes ámbitos y que está comprometiendo actuaciones o gastos como el refuerzo de personal, ya con el límite cubierto. O que en mayo se añadan otros 500.000 euros para Fiestas. Una sensación, entre sindicatos, oposición y funcionarios, que tirando de símil futbolístico, parece el "patadón hacia adelante". Aunque el edil de Hacienda siempre sostiene que la situación es de "gestión diaria".