ALICANTE. El director de Negocio de Alibaba Group en España y Portugal, Ernesto Caccavale, era uno de los ponentes que más expectación había levantado entre los asistentes al Congreso de Directivos de CEDE en Alicante. No en vano, el gigante chino de la distribución online es una de las cinco mayores compañías del mundo por capitalización bursátil y el principal operador en un mercado de 1.000 millones de consumidores, y el cónclave versaba precisamente sobre los retos para los directivos de las empresas españolas en una sociedad cada vez más digitalizada.
Caccavale instó a las empresas españolas, con independencia de su tamaño, a poner sus ojos en China, y servirse para ello de plataformas de comercio electrónico como la suya que pueden favorecer la internacionalización de pymes. "Ese tren está pasando ahora mismo", advirtió, "los consumidores chinos quieren comprar productos europeos, y si no encuentran productos españoles, comprarán uno similar que sea francés o italiano". El directivo de Alibaba insistió en que los consumidores chinos ven mucho más atractivo el producto fabricado en la Unión Europea que el 'made in China', por lo que animó a crear canales comerciales entre el Continente y el gigante asiático.
"El comercio tradicional tiene nuevas oportunidades si se actualiza", señaló Caccavale. De hecho, su compañía ha actualizado al 82% de las tiendas tradicionales con las que trabaja, mediante el programa New Retail. "El eCommerce no es un riesgo, sino una oportunidad enorme" para el comercio clásico, sentenció. En cuanto a la importancia de China como mercado online, Caccavale señaló que el país aporta el 40% del comercio electrónico de todo el mundo (su compañía tiene una cuota de mercado del 70%), a pesar de que la mitad de la población no tiene acceso a internet. "Cada chino compra cinco veces más que un europeo a través del comercio online". Su empresa, además, tiene previsto invertir 15.000 millones de dólares para reducir la brecha digital en China.
Caccavale era uno de los tres participantes en el panel 'Innovación tecnológica para la generación de nuevas oportunidades de empleo', del cual también formaban parte el director general de Innovación de Suez España, Manuel Cermerón, y el director general en Cataluña y la Comunitat Valenciana de Telefónica, Kim Faura. Éste consideró que "en la disrupción digital, la robótica y la inteligencia artificial van a ser fundamentales", hasta el punto de que cada robot reemplazará seis puestos de trabajo actuales en un horizonte de dos décadas. "Algunos robots ya están superando el Test de Turing", recordó (el primero, en 2014), diseñado para discernir su una máquina puede pensar como un ser humano.
En este sentido, Faura señaló que según diversos informes los empleos con más probabilidades (el 99%) de ser realizados por robots dentro de veinte años son los de operador de call center, vendedor de retail y piloto comercial. No obstante, la robotización del trabajo creará otros empleos, "como sucedió cuando la máquina de vapor reemplazó el trabajo de centenares de operarios en la Revolución Industrial". Así, "el 65% de los alumnos de Primaria trabajarán en puestos de trabajo que aún no existen", destacó. "Hace 10 años, nadie hablaba de community managers o analistas de Big Data, que ahora son dos puestos muy demandados".